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Madrid, otra vez capital de la Champions dos años después
Dos años después de la final de Lisboa, Madrid superó su apuesta para repetir reinado continental con la presencia de Real y Atlético en la final de la Liga de Campeones, un hecho sin precedentes en el fútbol europeo.
Blancos y rojiblancos vivirán el 28 de mayo en Milán una final de máxima rivalidad que continuará el desafío de 2014, cuando el Real Madrid conquistó su décima Copa de Europa con su triunfo en la prórroga por 4-1 ante el equipo de Diego Simeone.
Lisboa marcó la primera final de Copa de Europa entre dos equipos de la misma ciudad y los mismos protagonistas madrileños acaban de elevar la magnitud del récord en apenas dos años.
El amplio aforo del estadio de San Siro, cercano a los 80.000 espectadores y superior en casi 15,000 al Estadio da Luz de Lisboa, permite hablar de una concentración única de hinchas de fútbol de una misma ciudad. La previsión es que se repartan más de 50.000 entradas entre las aficiones de los dos equipos.
La prensa española celebró hoy el hito. "Madrid mejora el récord, duplicando el éxito, por si alguna otra ciudad (¿Milán? ¿Manchester? ¿Londres?) pretendiera igualarlo", explicó el diario "As".
"El País" afirmó que "la Champions es de Madrid" y "El Mundo" reflejó que "la historia regresa al minuto 93", recordando el gol de Sergio Ramos en el tiempo de descuento que llevó la final de Lisboa a la prórroga y propició el triunfo final de los blancos ante el hundimiento rival.
Quedan más de tres semanas para la final, pero la expectación se disparó desde la misma noche del miércoles, cuando el Real Madrid cerró su pase ante el Manchester City 24 horas después de que el Atlético hiciera lo propio ante el Bayern Múnich.
El bando rojiblanco ya habla abiertamente de "revancha", de la oportunidad de vengar lo ocurrido en Lisboa. Probablemente le llegue la oportunidad mucho antes de lo que pensaban sus hinchas más optimistas.
Mientras, el Real Madrid recupera el argumento del "orgullo" después de una extraña temporada, que incluyó la destitución del técnico Rafael Benítez, la llegada del inexperto Zinedine Zidane, el hundimiento del equipo a finales de febrero y la resurrección actual. Está a un partido de ganar su undécima Copa de Europa.
Sin embargo, los días previos a la final de Milán ofrecerán una diferencia sustancial respecto a lo que ocurrió hace dos años: esta vez el Atlético es como mínimo igual de favorito que el Real. Lo dicen las casas de apuestas y los propios futbolistas. "Estamos al 50 por ciento, han demostrado que son un rival complicado", aseguró Ramos.
Conociendo el precedente de Lisboa, se puede aventurar que Milán vivirá toda una fiesta entre dos hinchadas llenas de rivalidad, pero pacíficas.
Durante los últimos años, los dirigentes de ambos clubes se esforzaron en "limpiar" de violentos sus respectivos estadios y siempre extreman las medidas de seguridad para intentar evitar que los radicales viajen a los partidos disputados fuera de España.
Lo que es seguro es que la final no será barata para los hinchas, pues la especulación se disparó en Milán y los cálculos de avión, alojamiento y entrada ya se sitúan por encima de los 1.000 euros (más de 1.140 dólares). Es el precio por asistir a un pedazo de historia.