PARÍS.- Marine Le Pen y Emmanuel Macron mantuvieron un tenso debate en la recta final de la carrera hacia el Elíseo. La candidata del ultraderechista Frente Nacional atacó desde todos los flancos a su rival progresista, al que calificó de “candidato de la globalización salvaje”.

Macron se defendió (puso de manifiesto la ausencia de “finura” de Le Pen) y le plantó cara con argumentos. 

Los aspirantes a ocupar el Palacio del Elíseo expusieron sus planes de Gobierno con una cómoda ventaja a favor de Macron, abanderado de En Marche!, que, según los sondeos, saca 20 puntos a Le Pen, líder del Frente Nacional, para quien este combate dialéctico representó una última oportunidad de revertir la tendencia.

El punto álgido del cara a cara llegó durante la discusión sobre la lucha antiterrorista. Le Pen acusó directamente a Macron de mostrar “complacencia con el fundamentalismo islamista”. “La seguridad está totalmente ausente” de su proyecto político, afirmó la candidata, al tiempo que prometió expulsar a todos los individuos que estén bajo vigilancia por yihadismo y cerrar las “mezquitas salafistas”.

En respuesta, Macron recordó que una de sus promesas electorales es crear una unidad antiterrorista que responda ante el presidente de la República y reforzar los recursos de las fuerzas de seguridad, tanto civiles como militares, en la lucha contra el yihadismo. Expulsar a los sospechosos no surtirá efecto, advirtió y defendió “una medida quirúrgica” frente a la generalización de Le Pen.

Macron también prometió “tolerancia cero a la delincuencia común”, algo que Le Pen aprovechó para hacer su propia propuesta: “tolerancia cero significa que cada crimen, cada delito, tendrá una sanción que se aplicará”. La representante del Frente Nacional lamentó que ahora las penas de cárcel puedan sustituirse por “brazaletes” o “visitas al juzgado”.

Otro de los temas polémicos fue la visión sobre Europa de ambos aspirantes. Le Pen ha insistido en su idea de crear una UE integrada por “naciones verdaderamente soberanas”, para lo cual - subrayó- es necesario que Francia recupere su poder de decisión sobre el control migratorio, la política comercial y la moneda. Frente a la “guerra de divisas” que anticipa Le Pen, Macron abogó por “construir un euro fuerte y una política europea fuerte”.

Sobre política exterior, Macron apostó por “una Francia que sea capaz de construir paz” y trabajar para ello con sus aliados europeos y también con Donald Trump. “Francia solo será respetada si sigue siendo Francia”, espetó Le Pen, que criticó la sumisión a Alemania. “En cualquier caso habrá una presidenta en Francia”, dijo, sugiriendo que, si gana Macron, gobernará la canciller alemana, Angela Merkel.

La discusión incluso cayó en descalificaciones personales. Le Pen describió a Macron como “el candidato de la globalización” que hará perder poder adquisitivo a los franceses. Macron contraatacó llamando mentirosa a su rival: “tu estrategia es simplemente decir un montón de mentiras y decir solamente lo que no va bien en el país”.

Según un sondeo realizado tras el debate, el 63% de los telespectadores vio más convincente a Macron, mientras que un 34% señaló a Le Pen como “ganadora”. En cualquier caso, el verdadero vencedor lo decidirán las urnas el próximo domingo. 

Con información de Diario de Ibiza y Euronews.