Es un hecho que el alguna vez reconocido como “El Sol de México”, Luis Miguel, pasó una semana  eclipsado a partir de la cancelación de sus conciertos en el Auditorio Nacional del D.F.

 Y es que si bien el cantante nunca se caracterizó por tener la mejor relación con los medios, la manera en que manejó la información sobre el estado de salud que propició que se pospusieran dichas presentaciones sólo puso en evidencia su falta de tacto ya no digamos para con los representantes de la prensa sino con el público, que aunque un gran porcentaje del mismo sigue muy asiduo tan es un hecho que ya no goza con la popularidad de años anteriores al grado de que su disquera Warner Music, hizo oficial a mediados de la semana que ya no considera rentable el producto que el cantante ofrece.

 Según lo informó el grupo Reforma, una fuente allegada al intérprete confirmó que la agridulce relación entre el intérprete, su management y el sello con el que firmó contrato en 1987 no continuará porque sus discos ya no se venden como antes y Luis Miguel no demuestra interés por crecer musicalmente. “A Luis Miguel sólo le queda un disco por grabar con la empresa y están llegando a un acuerdo para que ya no se haga y le den su carta de retiro, para así terminar la relación”, indicó el informante. Renovarse o morir, he ahí el dilema.

 Mientras esto ocurre en este lado del charco, en la Unión Americana, luego de haber sido el elegido para cerrar la más reciente edición de los American Music Awards el domingo pasado, el canal de videos VH1 anunció el martes pasado que el cantante de origen canadiense Justin Bieber había rebasado el récord impuesto por la legendaria banda británica Los Beatles de tener la mayor cantidad de sencillos simultáneos en la lista del Hot 100 de Billboard. Otra muestra de que los tiempos y la industria de la música ha cambiado, inclinándonos más por opinar que más para mal que para bien.

 Para terminar, y ya que mencionamos al célebre cuarteto de Liverpool, otra señal no sabemos si apocalíptica o no es que en los mencionados American Music Awards es que por segundo año consecutivo el premio más importante de la noche, el de Artista del Año, no fue precisamente para un solista o grupo norteamericano sino a una agrupación británica como lo es One Direction, quienes ahora son curiosamente también cuatro integrantes tras la salida en marzo de este año de Zayn Malik, uno de sus cinco miembros originales quien decidió abandonarlos a la mitad de su gira mundial y en vísperas de la grabación de su quinto álbum en cinco años de carrera musical.

 Pues tal y como lo habíamos anticipado en nuestra columna pasada, One Direction aterrizó en nuestro país a principios de semana para su presentación la noche de ayer en los Premios Telehit pero también en medio de su gira promocional de esa quinta producción que a estas alturas del año es ya una realidad titulada “Made in the A.M.” misma que presentaron ante sus fans de México luego de que Twitter organizó un concurso para encontrar a los 10 países con más fans de la banda y el nuestro obtuvo el primer lugar con cuatro millones 388 mil 810 tuits. La mejor manera de retribuirles ese honor, según sus fans, fue cantarles el traidiconal “Cielito Lindo”. Una vez más, no sabemos si reír o llorar con este panorama musical de la música pop en español en México o en inglés alrededor del mundo.

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