Usted está aquí
Los Steelers pensaban que tenían a Le´veon Bell seguro
LATROBE.- Los Steelers de Pittsburgh pensaban que estaban cerca de lograr un contrato a largo plazo con Le’Veon Bell en los momentos finales de la fecha límite para firmar a jugadores con la etiqueta de franquicia, pero el running back estrella declinó los términos del equipo.
El agente de Bell, Adisa Bakari, dijo que él y su cliente nunca tuvieron un acuerdo con los Steelers. “Cualquier historia contrario a eso es falsa”, dijo.
El diario Pittsburgh Post-Gazette reportó el viernres que Bell —quien no ha ido al campamento de entrenamiento y no ha firmado su oferta de etiqueta de 12.1 millones— declinó una oferta “en el último minuto” a pesar de que el equipo y el agente habían llegado a un acuerdo para un contrato con términos que le pagarían más de 12 millones anuales por 5 años.
El equipo y Bell, con su agente, estaban tratando de negociar un contrato a largo plazo antes de que la fecha límite para jugadores con la etiqueta de franquicia, para firmar extensiones, terminara a las 16:00 horas del pasado 17 de julio.
Bell dijo al expirar la fecha límite: “me siento como que valgo más de lo que me están ofreciendo”, pero que jugaría la temporada completa del 2017. Le’Veon podría reportarse con Pittsburgh la próxima semana, aunque el equipo ha mantenido que no está seguro exactamente cuándo regresaría el corredor.
Tras promediar cerca de 130 yardas desde la línea de golpe por juego en sus primeras cuatro semanas, Bell podría convertirse en el running back mejor pagado durante el transcurso de un contrato a largo plazo. En estos momentos ese honor le corresponde al running back de los Falcons de Atlanta, Devonta Freeman, cuyo salario anual promedio es de 8.25 millones.
Bell también se considera un receptor elite con al menos 75 atrapadas en dos de sus últimas tres temporadas. De la manera que Bell ve las cosas, sus habilidades híbridas le merecen un mercado más grande, quizá cerca de los 15 millones al año.
$12millones anuales durante 5 temporadas es el acuerdo que habían arreglado Steelers y el agente de Bell.