CIUDAD DE MÉXICO.- Las exportaciones son uno de los ejes de la economía de cualquier nación; sin embargo, para generar un verdadero impacto necesitan ser parte de un círculo virtuoso que promueva el crecimiento económico.

Bajo esta premisa, las exportaciones necesitan de las Pymes y las Pymes necesitan de esta actividad económica. Sin embargo, ¿cómo lograr crear oportunidades para ambas?

Las exportaciones en México están lideradas por tres poderosas industrias: automotriz, manufactura y alta tecnología; coincidentemente, estas tres actividades económicas son el motor de muchas Pymes que tienen en frente diversos factores, a favor y en contra, en sus actividades operativas.

De acuerdo con el estudio Las Exportaciones en México: Desafíos y Oportunidades, de la firma UPS, los empresarios que ya exportan identifican algunas prioridades en el tema:

-Protección de mercancías
-Máxima eficiencia en los tiempos de entrega

Los anteriores puntos demuestran que la logística juega un papel fundamental en la ruta de la competitividad y, al mismo tiempo, puede ser el talón de Aquiles de cualquier empresa.

Y es que con el ritmo de crecimiento exportador que se registra en México, que se espera al cierre de 2015 (a finales de este año) haya tenido un alza de 6% anual, las Pymes necesitan de servicios logísticos avanzados.

Un estudio realizado por UPS a empresas industriales calificadas como de talla mediana y pequeña, por tener menos de 250 trabajadores, encontró que 89% de sus actividades giran en torno a las exportaciones e importaciones, mientras solo un 11% se dedica a las exportaciones en exclusiva.

Del total de empresas que desde México exportan a más de un país, un 56% envía parte, o el total, de su producción a EU; un 52% la envía a América Latina;  y un 24% hace sus envíos a países de fuera del continente americano y de casi todo el mundo.

Sus actividades a fondo
Asimismo, el impulso de las industrias que más han crecido en los últimos años ha logrado atraer a sus proveedores en una dinámica de crecimiento.

En cuanto a los ingresos, el resultado tiene diversos tintes. En los últimos 3 años, para un 32% de las empresa los ingresos han aumentado en sólo un dígito; para el 21% de ellas el aumento ha alcanzado los dos dígitos; en otro 30% el saldo ha sido 0 (blanco); mientras, un 7% prefirió no proporcionar datos,  otro 7% tuvo desbalance por un dígito, y 3% aseguró que sus actividades al respecto disminuyeron en dos dígitos.

Pero después de todo, ¿cómo lograron estas empresas su primera venta a un cliente en el extranjero? Para un 28% de ellas el cliente vino a la entidad por recomendación; para el 24% el consumidor ya era suyo, y para 14% el cliente llegó después de visitar una feria.

Las empresas encuestadas identificaron diversos retos cuando de exportar se trata. De mayor a menor, estos son:

-El riesgo de pérdida o daño de la mercancía
-Entregas veloces y confiables
-Velocidad en aduanas fronterizas
-Costos de envío y logística
-Claridad en los procesos
-Normas de seguridad y técnicas
-Pronto pago de bienes
-Retorno de los impuestos (locales y extranjeros)
-La lucha en el mercado destino
-Encontrar un socio confiable y eficiente en venta
-Inversión en ventas y marketing
-Barreras del idioma y costos de traducción

Finalmente, 58% de las empresas analizadas exporta desde hace más de 10 años; 18% de 6 a 10 años; 10% de 4 a 5 años; 9% de 2 a 3 años; 3% menos de un año; y 2% desconoce ese dato.