Mañana lunes, 18 de junio, Miguel Riquelme cumplirá 200 días como Gobernador de Coahuila.

Sé que la fecha no es habitual para un corte de caja. Lo acostumbrado es un balance a los 100 días de tomar posesión del cargo, y de ahí pegar un salto cuántico hasta cumplir un año, a propósito del Primer Informe de Gobierno. Entre uno y otro acontecimiento, mientras tanto, toca desentenderse de cualquier retrospectiva. Ajá.

En mayo, sin embargo, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) publicó el “Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza”, con el cual mide un dato interesante: el porcentaje de población con ingreso laboral inferior a la línea de bienestar mínimo. Dicho en otras palabras: la relación del salario frente al valor de la canasta alimentaria. Su poder adquisitivo, pues.

Y en el primer trimestre de 2018, comparado con ese mismo lapso pero de 2017, en Coahuila creció la pobreza de 25.9 a 28 por ciento. Reitero: de acuerdo con el Coneval.

Tal vez la cifra porcentual no le diga mucho. Convertido a personas, en cambio, representan 60 mil habitantes empobrecidos. Para dimensionar, equivale a la mitad de la población en Ciudad Acuña.

Que se trata de una pobreza moderada, no extrema. De acuerdo. Pero Coahuila es el séptimo estado del País donde más aumentó. Sólo por detrás de Guerrero, Morelos, Tabasco, Campeche, Durango y Chihuahua.

¿No le resulta por lo menos curioso?

Por separado, en el debate de los candidatos al Senado, primera fórmula, organizado el pasado viernes en Torreón, sin citar la fuente los moderadores representantes del INE afirmaron que “485 mil coahuilenses comen una sola vez al día”. Es decir, hay una carencia importante.

¿Qué hace al respecto Gobierno del Estado?

Tan sólo en el primer trimestre del año pagó 867 millones 702 mil pesos de intereses de la deuda pública, y 206 millones 630 mil pesos en “servicios de comunicación social y publicidad”.

Ahí se fuga la mayor parte del presupuesto: 9 millones 641 mil pesos diarios van a la basura, o sea cubren intereses, y 2 millones 295 mil 900 pesos al día caen en la canasta de la publicidad. Esas son las prioridades.

Por el contrario, en esos mismos 90 días, sólo 114 millones 730 mil pesos han sido destinados a “inversión pública no capitalizable” (obra pública).

En resumen: dos a uno, gana publicidad. Y ocho a uno, golea intereses contra obra pública.

Ante la escasez de resultados, en defensa del Mandatario se argumentará que asumió el cargo en medio de un proceso electoral y que su margen de maniobra, afectado por el periodo de veda, es menor a un ejercicio fiscal ordinario.

La entidad, no obstante, organizó elecciones en 2009, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015 y 2017. Ahora, en 2018, padecemos –sí, padecemos– la octava campaña en 10 años. No se justifica, por tanto.

CORTITA Y AL PIE

Mañana lunes, 18 de junio, se cumplen los primeros 200 días al frente de la administración estatal.

No en una cáscara de nuez, pero sí en un párrafo se pueden resumir: dos giras por Asia sin resultados concretos hasta el momento. Compra indiscriminada de camionetas pick-up. Crédito solicitado por 980 millones de pesos. Levantamiento de datos, por segunda campaña consecutiva, para un hipotético “monedero rosa” que pagará “200 pesos en promedio” después de las elecciones. La farsa de la encuesta “Coahuila Opina” que costó 12.7 millones de pesos.

También mañana se falla el negocio que supone la licitación por 2 millones 620 mil despensas a un costo de 585 millones de pesos.

Oculto, sin embargo, había permanecido el dato importante: 60 mil nuevos pobres en los primeros 90 días de Gobierno.

LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS

Al cumplirse 100 días de gestión cuestioné dónde estaba el Gobernador, ya que avanzamos ese periodo en piloto automático y con el freno de mano puesto. Al sumar 150 pregunté dónde estaba el Plan Estatal de Desarrollo 2017-2023, pues el documento presentado –que debería regir las políticas públicas– fue superficial, poco técnico y peor estructurado que su antecesor.

Mañana se completan 200 días. ¿Hacia dónde vamos?

@luiscarlosplata