Lo que estamos viviendo. Ya empezó el Peje a barrer de arriba hacia abajo

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Lo que estamos viviendo. Ya empezó el Peje a barrer de arriba hacia abajo

La comunicadora de televisión transmitió con demasiada rapidez un resumen de los resultados de la represión a la corrupción, tan de prisa que no logré anotar nombres, pero me pareció que el número de exgobernadores que en este momento están en la cárcel son nueve. El de Veracruz había caído en el sexenio anterior; un tamaulipeco fue apresado en Italia y espera juicio en Estados Unidos; otro viene del presidente Cedillo y, al parecer, los demás son de López Obrador, incluyendo al de Chihuahua, que enfrentará la justicia cuando lo extraditen a México. César Duarte Jáquez cayó gracias a la lucha del gobernador de esa entidad al que patentemente no se le apoyaba por ser panista. Duarte debía caer por sus desmanes, que están entre los más siniestros. Si fueran nueve exgobernadores considero que faltarían cuatro o cinco; burócratas de alto nivel todavía queda un centenar suelto. Es difícil saber hasta dónde llegará el Presidente. De Coahuila nada sabemos. Cuando Javier Villarreal Hernández, enjuiciado en Texas, aceptó el desvío de dos millones y medio de dólares de la tesorería estatal, de inmediato el gobierno de Coahuila declaró que acá no faltaba nada, que no eran nuestros. ¡Pero era una confesión ante un jurado!

Aparentemente el Presidente está cocoreando a las fuerzas más violentas del País: los corruptos que se enriquecieron en los puestos públicos y dos grupos de narcotraficantes muy peligrosos. López Obrador ha mencionado al héroe fracasado Francisco Madero como ejemplo del presidente más golpeado por la prensa como él lo es ahora. Algún comentarista dijo que sus casos no son comparables. ¿Por qué habían de serlo a un siglo de distancia? La historia no da vueltas. El asesinato de Madero fue respaldado por el embajador de Estados Unidos quien animó a un traidor a dar el golpe.

Se me ocurre que el Presidente expone su vida de continuo porque es muy valiente y porque es muy inmaduro; vive una adolescencia prolongada. Por lo pronto hay quienes ya han aparecido en las calles con pancartas que dicen “muera AMLO”. Y eso no es tan grave sino lo que podría estar preparando el sindicato del mal. Hay que recordar que a Luis Donaldo Colosio lo asesinó, como dijo Salinas, “la nomenclatura del PRI”. Todo fue tan truculento, tan preparado que aun Jacobo Zabludovsky y Talina Fernández resultaron actores de categoría retrasando varias horas la noticia. Y las fuerzas diabólicas que lo mataron subsisten. ¿Quién preparó la trampa en Lomas Taurinas?

Las posibilidades de que Lozoya escupa contra sus colegas es mucha. De la certeza de pasar lo que le queda de vida en la cárcel (con su mujer y su madre) a levantar tantito la cortina, escogió esto. Es una rata, pero prefiere pasar sus últimos años en una cárcel dorada que en una celda; negocia su futuro a cambio de datos. Y va a salpicar no sólo a Peña Nieto sino a otros expresidentes, como Carlos Salinas. ¿No vendió Altos Hornos?, ¿no era presidenta del consejo de AHMSA la señora Cecilia Occelli?, ¿quién participó en la compraventa de la planta de fertilizantes? Si, los corruptos son innumerables. Ya empezó el Peje a barrer de arriba hacia abajo y, por el bien de México, no debe detenerse.

Me asombró la condena multitudinaria en la prensa contra el Presidente y también entre la clase media ignorante. ¡Vamos hacia el comunismo!, se leía en pancartas en el desfile de 200 carros (200 de 200 mil). ¿Cuál comunismo?, todos los organismos empresariales lo felicitaron porque abrió una monumental puerta al mercado, a inversiones extranjeras y nacionales. ¿No tiene enormes inversiones en el Sureste? (en eso estoy en desacuerdo, pero ni modo).

La propuesta de los intelectuales contra AMLO es interesante en cuanto a redacción, pero su honestidad no es creíble. Aguilar Camín anduvo limpiando el calzado a Salinas, Echeverría y López Portillo. El Güero Castañeda trabajó con Fox y ha cambiado de banderas varias veces. ¿Y cuántos proyectos le fueron aprobados por presidentes corruptos a Enrique Krauze? ¿Y Javier Sicilia cuya obsesión era besar a Manlio Fabio Beltrones y Felipe Calderón? Otros de los que firmaron el libelo son más creíbles y, creo, honestos.