A partir del martes 13 de marzo y hasta el 15 de mayo se podrán observar en el Palacio de la Escuela de Medicina de la Ciudad de México los 80 grabados que el artista Francisco de Goya realizó para su serie conocida como “Los Caprichos”.

Realizados a finales del siglo XIX, estas estampas impresas a principios del siglo XX, —las placas originales ya no fueron posteriormente utilizadas para su resguardo y conservación— son una crítica a la sociedad española de ese tiempo.

Dividida en tres partes, la primera abarca las obras que exponen de manera satírica las costumbres de la vida cotidiana; la segunda es más puntual sobre los abusos del gobierno, el clero y la nobleza y las desigualdades económicas, mientras que la tercera parte fue creada durante el período de su vida en perdió el oído y su visión del mundo se volvió aún más pesimista y oscura.

La serie fue nombrada de esta manera dado que cada una de las piezas posee un nombre incoherente, todo esto para evitar que la Santa Inquisición continuara molestando al autor.