Luego del muy decepcionante final el domingo pasado de la telenovela de Azteca “La hija pródiga”, hoy es Televisa la que termina con más pena que gloria la telenovela “Me declaro culpable”.

Fue a principios de noviembre del 2017 cuando, en sustitución de la todavía más desastrosa “En tierras salvajes”, iniciaba con muy buenas expectativas “Me declaro culpable” empezando por el espinoso tema de la eutanasia alrededor del cual iba a girar su trama, pero sobre todo como lo comentamos en estos espacios, en su momento, por un lado, el regreso estelar del galán argentino Juan Soler a Televisa tras su viaje de Telemundo a Azteca haciendo mancuerna con su exitosa pareja del clásico “Cañaveral de Pasiones”, de 1996, Daniela Castro, y agregándose a ellos en un no menos atractivo triángulo amoroso la guapa y talentosa Mayrín Villanueva (“Mentir para Vivir”), con la gran oportunidad de brillar mucho más de lo que lo hubiera hecho en la fallida “En tierras salvajes”.

Y nada, que como aquí lo escribimos también daba pena ver a Daniela Castro sobreactuar a todo lo que daba desde su primer capítulo como la esposa bipolar del personaje de Juan Soler que era el abogado que se enamoraba del personaje de Mayrín Villanueva por haber quitado de sufrir a su esposo de la enfermedad de la leucemia, eso sin contar al galán de la historia juvenil, Juan Diego Covarrubias (“La vecina”), no quedarse atrás en competencia de sobreactuación como un joven atleta a quien el personaje de la actriz rusa Irina Baeva (“Vino el amor”) atropellaba tras haber sido drogada por un novio maloso (Pedro Moreno) y quedar paralítico y por ende imposibilitado a seguir con su prometedora carrera como deportista.

Por desgracia, ahí no quedó todo, ya que fuera de la trama y la producción en sí, apenas a unos capítulos de colchón ya grabados para transmitirse al aire, al regreso de una locación el director de escena Claudio Reyes Rubio y la directora de diálogos Maru Dueñas fallecieron intempestivamente en un accidente automovilístico, trastocando no sólo al equipo de creativos sino anímicamente atormentando a la buena productora Angelli Nesma (“Lo que la vida me robó”) al grado de que no quedó otra que terminar la telenovela antes de lo planeado y tan pronto como la noche de hoy, a pesar de que el rating, directores como Sergio Cataño y los libretos de escritores de cabecera de la señora Nesma como Rosa Salazar Arenas, Juan Carlos Alcalá y Fermín Zúñiga trataron de enderezar el barco.

Lo más triste de “Me declaro culpable”, independientemente de lo sorpresivo que pueda ser su final de la noche de hoy, en punto de las 20:30 horas a través de “Las Estrellas” es que a falta de tener otra telenovela lista para que entre en su lugar, lo que los programadores decidieron para llenar ese espacio fue transmitir un doble capítulo de la serie unitaria “La Rosa de Guadalupe”, que bueno, tiene su público y es de los productos que aseguran un rating cuando menos adecuado que preceda las telenovelas en el horario estelar “Un papá a toda madre” y “Caer en tentación” … pero siendo objetivos, en un género que nació y se consolidó a nivel, no sólo nacional, sino mundial partiendo de esta empresa televisiva es más motivo de duelo que de celebración.
 
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