CDMX.- Delfina Gómez Álvarez fue designada como titular de la Secretaría de Educación Pública.

Sin embargo, la maestra de primaria está ligada al grupo que comanda la exlíder magisterial, Elba Esther Gordillo.

Según relata el semanario Proceso, este nombramiento podría responder a un asunto político de Andrés Manuel López Obrador, en relación con las elecciones del 2021 y a favor de Morena.

Uno de los retos principales contra los que lidiará la profesora originaria de Texcoco, quien nació en 1962, será el rezago que dejó la educación a distancia y, posteriormente, concretar el retorno a las aulas, dentro de las normas de la Nueva Normalidad.

Según la entrevista que realizó Proceso a Alma Maldonado Maldonado, investigadora del Departamento de Investigaciones Educativas del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados, “este nombramiento obedece a su lealtad a López Obrador, quien, primero, la impulsó como candidata a la gubernatura del Estado de México y después la designó superdelegada del gobierno federal en esa entidad”.

Para Maldonado Maldonado, podría ser grave que la única experiencia como docente de Delfina sea en el nivel básico.

“La SEP no sólo atiende la educación básica, sino otros niveles más complejos, por eso me preocupa ese perfil de Delfina”.

Para la investigadora, el grupo de Elba Esther Gordillo se verá beneficiado tras su asignación. Aunque el verdadero reto siempre será el retraso educativo por la pandemia del COVID-19.

Wilber Santiago Valdivieso, vocero de la Sección 22 de la CNTE, aseguró que la llegada de Gómez Álvarez intentará influir en las elecciones del siguiente año.

“Con Delfina en la SEP vendrá el pago de facturas y el retorno del grupo de Elba Esther al poder, el cual también maniobra a través de Redes Sociales Progresistas, el partido satélite que pondrán a contender en estos comicios”, afirmó.

Marco Antonio Fernández Martínez, investigador de la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey y de México Evalúa, señala que la carrera política de Delfina ha estado marcada por escándalos de corrupción, pues, en entrevista con Proceso, aseguró que cuando ella era alcaldesa de Texcoco, cobraba un diezmo a los empleados del municipio para usar el dinero con fines electorales. Con información de Proceso