Guadalajara.- Chivas cerró el curso como lo empezó, perdiendo. Fue en Veracruz y ahora en Guadalajara. El Rebaño quedó lejos de la Liguilla y ahora queda más que pensar en el siguiente semestre. Un curso de aprendizaje y un final doloroso con goleada incluida. 

Chivas 0, Santos 3.

Este partido sirvió para muchas cosas. Si bien es cierto que la Liguilla ya se había escapado, estos 90 minutos sirvieron para ver los descartes. Los jugadores que no tienen espacio en este plantel.

El primer tiempo fue con llegadas de los dos equipos, Marchesín le sacó un golazo a Salcido y Toño a Tavares. Pero el juego se abrió con una genialidad de Santos una marcación penosa de Salcido. Al minuto 32 Bryan Rabello tomó el balón fuera del área, encaró a Salcido se lo quitó como si se tratara de un amateur, se dio el tiempo de perfilar al arco y disparó de derecha. Golazo del chileno ante un Salcido que pedía el cambio a gritos. Así fue, el de Ocotlán no salió a la cancha para el segundo lapso. El gol del chileno mató a Chivas, no hubo reacción. 

Para el segundo tiempo Almeyda fiel a su estilo se tiró a matar. Mandó tres cambios ofensivos, dejó un solo contención y dejó espacios. En pocos minutos el equipo lagunero hizo dos goles más y acabó el pleito. 

Centro al corazón del área, el Deditos López se perdió en la marca y Abella de cabeza venció a Toño quien ni para la foto se aventó. 
A los pocos minutos, un tiro lejano del Santos, el rebote le quedó pleno a César Ibáñez quien fusiló a Toño Rodríguez. 

0-3 y Santos caminando, sin esfuerzo. Los últimos minutos el Rebaño buscaba con más intensidad que idea, muchas ganas y poca claridad, nada.

AMONTONAMIENTO

El Rebaño acabó el curso con tes centros delanteros, Bravo, Michel Vázquez y el Chelito Zaldívar. Tres nueves nominales para hacerle daño a los laguneros y no pudieron hacer un tiro al marco. Las dos claras de gol fueron de Salcido y el Tortas Pérez, pero los dos fueron controlados por Marchesín. 

Chivas se despidió con una goleada en contra en casa. Un doloroso 0-3 que el Santos propinó con autoridad. Un resultado que mostró lo que pasó en la cancha, un solo equipo en el terreno de juego y Chivas desnudado. Pocas llegadas y ni un gol. 

El colofón del semestre no es tan malo, el título de Copa y 21 puntos. Lo necesario para no descender. 

El Rebaño dejó de pelear por el título para ver semana tras semana qué hace el Morelia y Dorados. Hoy el Chiverío depende de sí mismos para seguir en el Máximo Circuito, pero la realidad es que para pensar en Liguilla o en un título se quedaron lejos. Fracaso en todas sus letras. El Omnilife cierra sus puertas hasta el próximo 10 de enero. Sigue una pretemporada y queda pensar en otro semestre para luchar por no descender.