La NFL es un deporte de contacto y muchas veces, las personas que trabajan en los estadios están expuestos a golpes a pesar de no entrar al emparrillado. 

Durante el pasado Monday Night Football, Kirk Cousins, mariscal de campo de los Redskins de Washington tackleo a una porrista de los Panthers que se encontraba a un costado del emparrillado. 

Cousins corría para ganar yardaje pero fue sorprendido por un defensivo rival que lo aventó afuera del emparrillado y la inercia hizo que se detuviera con la porrista. 

La porrista fue prácticamente arrollada por el mariscal de campo que no pudo meter las manos y cayó al suelo. 

Las cosas no pasaron a mayores y ambos continuaron trabajando. 

Al final, los Panthers se vengaron del golpe a su porrista derrotando a los Redskins.