Cuando una pareja comienza a buscar un bebé, y ese embarazo tarda en llegar, comienzan las preocupaciones y los miedos. Las parejas entonces suelen consultar con los especialistas para determinar por qué no logran concebir. Y ahora los expertos indican que el médico debe hacer tan sólo una pregunta para determinar si la mujer tendrá su tan ansiado embarazo.

Investigadores, de la Universidad George Mason publicaron una investigación en la revista científica Fertility and Sterility donde revelan que para saber si una mujer tendrá un bebé, la única pregunta que deben hacer es si estuvieron más de un año buscando el embarazo, y si en ese lapso de tiempo no usaron ningún tipo de anticonceptivos. De ser así y el embarazo no se produjo, puede que exista algún problema de fertilidad en la pareja.

De acuerdo a Science Daily, y de acuerdo a los realizadores del estudio, la infertilidad se define cuando una mujer está sexualmente activa sin usar anticonceptivos durante más de un año sin quedar embarazada, o necesitar más de 12 meses para concebir.

Por otra parte, los resultados revelan además que los bebés concebidos después de más de 12 meses de intentos, nacen con menos peso, tienen una talla menor y su circunferencia craneal es más pequeña, lo que está relacionado con retrasos en el desarrollo, convulsiones y dificultad para tragar.

Una pregunta para ayudar a comprender la salud de mujeres y bebés
Más allá de la infertilidad en sí, los médicos advierten en este estudio que la simple pregunta anteriormente mencionada no sólo puede ayudar a comprender la salud de las mujeres que buscan concebir, sino también de los bebés nacidos. La infertilidad fue la condición médica observada más consistentemente asociada con un tamaño de nacimiento más pequeño, incluso cuando se ajusta el tratamiento de infertilidad. Es decir, que aunque la mujer haya podido concebir, el hecho de haber concebido después del año de búsqueda, o haber concebido bajo tratamientos de fertilidad, trae sus consecuencias para el desarrollo del bebé.

"Realizamos este estudio para mejorar nuestra comprensión del estado de salud de los padres, el tratamiento de la infertilidad y el estado de salud de las generaciones futuras", dice la doctora Buck Louis, de acuerdo a Science Daily. "Nuestros hallazgos sugieren que la infertilidad y las enfermedades crónicas pueden tener implicaciones duraderas para los resultados de salud infantil".

Factores de riesgo de la Infertilidad
De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina, una mujer alcanza su mayor fertilidad entre los 20 y los 25 años de edad. Las probabilidades de que una mujer quede embarazada disminuyen considerablemente después de los 35 años, y especialmente después de los 40, aunque la edad en la que la fertilidad comienza a declinar varía de una mujer a otra.

La infertilidad femenina puede ser causada por:

• Trastornos autoinmunitarios
• Defectos congénitos modificadores el tracto reproductor
• Cáncer o tumor
• Trastornos de la coagulación
• Diabetes
• Consumo excesivo de alcohol
• Ejercicio excesivo
• Trastornos alimentarios o desnutrición
• Pólipos en el útero y el cuello uterino
• Uso de ciertas medicinas, como por ejemplo fármacos quimioterapéuticos
• Desequilibrios hormonales
• Obesidad
• Edad avanzada
• Quistes ováricos y síndrome de ovario poliquístico
• Infección pélvica o enfermedad inflamatoria pélvica
• Cicatrización a raíz de infección de transmisión sexual, cirugía abdominal previa o endometriosis
• Tabaquismo
• Cirugía para prevenir el embarazo (ligadura de trompas) o falla de la cirugía de recanalización de trompas (reanastomosis)
• Enfermedad tiroidea

¿Cuándo debería ser una preocupación?
Muchas parejas que buscan tener un hijo y no lo logran en los primeros meses suelen alarmarse de inmediato. Sin embargo, ante todo se debe tener cautela y tranquilidad, pues no tenemos nosotros la última palabra. Si aún luego de un año intentando concebir no logras el tan deseado embarazo, es tiempo de acudir al médico. Pero si antes del período estipulado las parejas comienzan a preocuparse, se genera una tensión y ansiedad que puede afectar negativamente a la concepción.

Lo fundamental es mantener la calma y buscar actividades que nos hagan bien, que nos dejen relajarnos y nos brinden placer. Hacer algún curso de alguna actividad que nos guste, salir a caminar, practicar algún deporte con la pareja, pueden ser alicientes para mantenernos en buen estado de ánimo y ocupar nuestra mente con cosas positivas.

Si una pareja que está buscando el embarazo no lo logra en los primeros meses, no debe preocuparse, sino ocuparse. La ansiedad puede jugar en contra de la fertilidad, por lo que si te preocupa la llegada de tu primer hijo, relájate y ten Fe. Y si luego de un año, o año y medio, no llega el embarazo, consulta a los especialistas, quienes te ayudarán a ti y a tu pareja en esta preciosa búsqueda.