La paradoja del feminismo

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La paradoja del feminismo

 El feminismo es “una ideología y un movimiento de cambio sociopolítico, basado en el análisis crítico de los privilegios del hombre y de la subordinación de la mujer en cualquier tipo de sociedad.” El feminismo radical se caracteriza por: la centralidad de la sexualidad, considerada como fuente de opresión de la mujer por parte de los hombres, la maternidad y el matrimonio. También por una idea marxista de la familia: Así como los obreros luchan contra los dueños, las mujeres luchan contra los hombres.  Si los obreros deben apropiarse de los medios de producción las mujeres tiene que controlar los medios de reproducción mediante la tecnología genética. Una corriente considera que el mundo verdadero es el profesional, competitivo, que hasta ahora ha sido dominado por los hombres. “El hogar es un confortable campo de concentración del cual hay que liberarse.” El feminismo radical presenta una nueva cara con la ideología del género que distingue entre las diferencias sexuales biológicas (sexo) y los roles que la sociedad atribuye a los hombres de las mujeres o el género. La igualdad la entienden como homogeneidad absoluta, como un par de gotas de agua, y no una igualdad en dignidad, y derechos legítimos como ocupar el mayor espacio público. La incorrecta tendencia a la imitación del modelo masculino de la vida, derivó después en la pérdida de la identidad sexual. “No hay nada más antifeminista que las feministas radicales que quieren eliminar la especificidad femenina, reducir todo comportamiento a papeles con actores intercambiables... La feminidad posee valores específicos en primer lugar la capacidad de acogida del otro, la naturalidad con el cuidado otra persona, su apertura la maternidad no sólo biológica…Son unas madres geniales.” David Foster Wallace escribió un libro de ficción, “Entrevistas breves con hombres repulsivos”. La entrevista número 28, de 1997, dice así: “K.: Qué quieren las mujeres de hoy. Esa es la gran pregunta. -La revista Cosmopolitan: por un lado, dice tienes que estar liberada y por otro asegúrate de encontrar marido. K.: La solución es comprender que las mujeres de hoy en día están en una situación imposible en términos de cuáles perciben que son sus responsabilidades sexuales. ….con dos conjuntos irresolublemente conflictivos de responsabilidades….. K.: Hazlo, pero no lo hagas. Es una contradicción sin salida…. E.: Una paradoja. Hagas lo que hagas, estás lista. Y los medios de comunicación la perpetúan. K.: Imagínate la cantidad de ansiedad interior que todo esto acumula sobre sus psiques…. E.: ¿Quién no estaría chiflada teniendo que soportar todo el tiempo ese montón de contradicciones en los medios de comunicación actuales? K.: Que se espera de ellas que estén sexualmente liberadas y que sean autónomas y enérgicas, pero al mismo tiempo son conscientes de la vieja dicotomía entre la chica respetable y la zorra y saben que hay chicas que siguen dejando que las usen sexualmente debido a una falta básica de respeto por sí mismas, y les sigue produciendo horror que las puedan ver como si formaran parte de esa clase de tías fáciles. E.: Además, recuerda que las chicas posfeministas de hoy saben que el paradigma sexual masculino y el femenino son fundamentalmente distintos… K.: «Marte y Venus». E.: Sí, exacto, y saben que como mujeres están programadas por la naturaleza para tener una visión más altruista y más a largo plazo del sexo y a pensar siempre en términos de relaciones más que en términos de follar simplemente, de forma que, si una mujer se hunde de inmediato y folla contigo, ella cree que en cierta forma te estás aprovechando de ella.”