La Marea verde ya inunda Minneapolis para el Super Bowl

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La Marea verde ya inunda Minneapolis para el Super Bowl

Los aficionados de Eagles han disfrutado de todos los atractivos que instaló la NFL. Foto: EFE
Miles de aficionados de Filadelfia han estado llegando en las últimas horas para respaldar a su equipo rumbo al título

MINNEAPOLIS.- Ya están por todos lados y comienzan a tomar la región como si fuera suya y en plena conquista. Los aficionados de los Eagles comienzan a multiplicarse por todos los rincones del área sede del Super Bowl, donde hoy enfrentarán a los actuales campeones de la NFL, los Patriots.

A unas horas de que su equipo disputé su tercer título, las personas de verde son una inmensa mayoría de las que pululan por las calles, hoteles, restaurantes y casi cada lugar público que se presente.

“Es parte del juego”, dijo Tyrone Miller. “No íbamos a dejar solo a nuestro equipo aquí, donde no los quieren. Venimos en apoyo. Hemos esperado tantos años y por fin estamos aquí”.

Miller viajó a Minneapolis acompañado de su esposa y dos hijos. 

Es aficionado con boletos de temporada de los Eagles desde hace 10 años y para su buena fortuna consiguió boletos a precio de taquilla, por 1,250 dólares, gracias a que se inscribió en la lotería de boletos para abonados del equipo.

“De otro modo hubiera sido imposible”, señaló Miller. “Es demasiado caro, pero tuve suerte. De todos modos me gasté mucho dinero en los boletos, que pagué con mi tarjeta de crédito”.

Miller y muchos aficionados más de Filadelfia comenzaron a mostrarse de manera mayoritaria comparada con la de los Patriots a partir del juegos en el Mall of America, el centro comercial más grande de Estados Unidos, donde está instalada buena parte del campamento de la NFL rumbo al Super Bowl, incluido el famoso Radio Row y el centro de prensa.

Ahí no paran de gritar; a veces sin groserías.

“Vimos que estaban tratando mal a nuestro equipo aquí en Minnesota y decidimos venir a apoyarlos”, comentó Jonathan Stevens. “Leímos que no querían darles de comer, ni aceptarlos en restaurantes. Mejor se hubieran puesto a jugar football hace dos semanas”.

Stevens se refería a que durante los primeros días de estancia de los Eagles en el área, algunos jugadores se quejaron en redes sociales que no querían atenderlos en restaurantes y centros comerciales.

En una de las tiendas de artículos deportivos del Mall of America, sólo tenían un jersey de los Eagles el miércoles, comparado con cientos de los Patriots.

“En todos lados es igual”, comentó Sarah Rivera, una aficionada de origen puertorriqueño de los Eagles. “Nos temen, nos tienen miedo porque dicen que somos escandalosos. Pero simplemente queremos apoyar a nuestros jugadores”.

Cierto que también en el centro de Minneapolis, en restaurantes, bares y cualquier otro lugar público como el Super Bowl Live, instalado en la calle Nicole, se oye el “¡e-a-g-l-es!” por doquier, incluso hasta en el lobby de los hoteles.