La enfermedad con mirada literaria

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La enfermedad con mirada literaria

Foto: Especial
Landero tomó conciencia de verdad de la enfermedad con la muerte de su padre, que falleció a los 50 años tras cuatro de dolencia.

La Fundación de Ciencias de la Salud ha indagado en esta mirada de la mano de tres escritores: Soledad Puértolas, Luis Landero y Luis Mateo Díez, con ocasión del acto conmemorativo de su 25 aniversario, celebrado en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando con la colaboración.

En este recorrido literario se han recordado las palabras del escritor portugués Miguel Torga, para quien solo, decía, hay tres cosas sagradas en la vida: la infancia , el amor y la enfermedad, y añadía que se podía traicionar todo en este mundo, menos a un niño, al ser que te ama, y a una persona enferma.

Estas son algunas de las reflexiones de los tres escritores durante el acto: Para Luis Landero escritor nacido en Alburquerque en 1948 y autor, entre otros, de “Juegos de la Edad Tardía” o “El Balcón en Invierno” (Tusquets),  la enfermedad al igual que el amor no se puede explicar a aquel que no lo ha sentido y por más palabras que use, el otro puede tener una idea aproximada pero no va a llegar al fondo del asunto.

“Para conocer la enfermedad hay que padecerla y no solo la enfermedad sino la secuela de sentimientos que supone: sentirse solo, sentirmiedo, incertidumbre. ..”

Landero tomó conciencia de verdad de la enfermedad con la muerte de su padre, que falleció a los 50 años tras cuatro de dolencia.

Para Soledad Puértolas, ( Zaragoza 1947) autora de “Con mi Madre” (Anagrama) o “Queda la Noche” (Planeta), entre otros,  defiende que se debe hablar de la enfermedad y juzga que la fuerza de la mente es la mejor aliada para soportarla.

La escritora tuvo conciencia de la enfermedad muy pronto y recuerda “muy bien la sensación de estar enferma de niña, de no poder levantarme de la cama, de estar recluida, de tomar medicinas muy amargas” porque tenía tifus.

”La enfermedad para mí es un momento de reclusión, de marginación…tienes conciencia de la diferencia…. Se cobra conciencia de uno mismo porque te aísla y te corta los hilos con los demás…y creo que tiene mucho que ver con la construcción de la identidad…”

Finalmente para Luis Mateo la enfermedad tiene componentes de “soledad extrema”, a  juicio de Luis Mateo Díez, (Villablino 1942) y autor “La Fuente de la Edad” (Alfaguara) o “La Ruina del Cielo” (Ollero y Ramos), entre otras obras.
“La convalecencia como experiencia es donde uno puede tener sensaciones fuera del dolor, habiendo superado ya la enfermedad. Conlleva y puede producir grados de conocimiento relacionados con la intensidad…”.