Sombras, escaleras, pasillos vacíos, ornamentos góticos en las gruesas paredes de piedra y el color negro que se cierne sobre todo como una mancha intangible. Ahí hay tres personajes, dos mujeres con pomposos vestidos y un hombre portando ropas igual de elegantes. Parecen iluminados a la luz de una vela, pero el verdadero origen de ese brillo es la visión del director mexicano Guillermo del Toro, quien eligió ese oscuro lugar para contar su nueva historia llena de secretos, espectros y esa magia tenebrosa y fascinante que tienen tantas de sus películas. Se trata de “La Cumbre Escarlata” (“Crimson Peak”), una historia que pretende ser un homenaje a diversas obras literarias y cinematográficas que el cineasta tapatío consideró necesario regresar de la tumba.

“Cuando hice el ‘pitch’ con la idea al estudio, lo que dije fue: ‘va a ser una película de Deborah Kerr pero a lo bestia’. Habían caído en desuso y se pusieron de moda las películas de ‘psycho-killers’, las de estilo serie B medio ‘pornsoft’ y las de ‘videos encontrados’, creo que ya están muy de güeva, por eso ésta es casi como un viaje al pasado”, explicó Del Toro en entrevista con Milenio, sobre sus ganas de regresar a un tiempo diferente del terror, una época donde la solemnidad y el romance no eran opacados por asesinos seriales, ni litros de sangre de historias de bajo presupuesto. “La Cumbre Escarlata” para Del Toro es más como un macabro cuento de hadas, similar a lo que hizo en “El Espinazo del Diablo” (2001) y “El Laberinto del Fauno” (2006), cintas que, junto a ésta, considera que forman una especie de trilogía. “Son las tres películas que más me gustan y tienen las tres una conexión temática y visual”, dijo a EFE.

La gran diferencia es que su nueva cinta no es una producción española como las otras, sino estadounidense, país en el que se había limitado a hacer fantasías que, aunque con su mismo estilo, tenían un enfoque más de aventura y menos sombrío, como “Blade II” (2002), “Hellboy” (2004) y, más recientemente, “Pacific Rim” (2013). De hecho, desde la galardonada “El Laberinto del Fauno” que Del Toro no dirigía dramas personales y sombríos, dejándole este trabajo a otros directores, pues se enfocó bastante en su labor como productor. “Don’t Be Afraid of the Dark” (2011) y “Mama” (2013), por poner dos ejemplos, fueron obras de terror que produjo sin dirigir y precisamente en ésta última fue donde conoció a Jessica Chastain, antagonista de “La Cumbre”.

Junto a la actriz comparten créditos Mia Wasikowska y Tom Hiddleston, quienes interpretan a Edith Cushing, una escritora y Sir Thomas Sharpe, un misterioso hombre de quien Edith cae enamorada, lo cual la arrastra hacia una mansión que esconde peligrosos secretos junto a la extraña hermana de Thomas, Lucille (Chastain). De forma inevitable, en cada entrevista que el mexicano dio para explicar esta historia, saltan toda clase de referencias a libros y películas, la principal inspiración que tuvo al momento de crear este nuevo mundo, con un guión escrito por él mismo junto a Matthew Robbins, con quien ya había trabajado en “Mimic” (1997).

DETRÁS DE LA CASA
“En definitiva, la película tiene una impronta literaria de los libros que yo leía de pequeño y de joven. Yo descubrí a (Mary) Shelley y (Jane) Austen al mismo tiempo, y el romance gótico se quedó en mi cabeza desde que vi a los cuatro años en el cine ‘Wuthering Heights’ (1939) acompañado por mi madre”, dijo el cineasta a EFE. Pero una de las más grandes influencias literarias fueron las novelas y relatos de Daphne DuMaurier, que también han sido adaptados por diversos cineastas a lo largo de la historia. “Su influencia aún está vigente. Era una escritora adelantada a su tiempo, con una narrativa compleja, aun siguiendo una trama relativamente simple: heroína que llega a un lugar peligroso con un galán enigmático y con secretos, y ella debe enfrentar el terror del pasado para aspirar a tener vida en un futuro. Es como un cuento de hadas, pero más truculento”, platicó a Milenio. 

Por otro lado, en cuanto a las influencias cinematográficas comentó en la misma entrevista: “Hay muchas referencias, muchos filmes de los que me nutrí para hacerla. Yo no estoy reinventando un género, ahí estaba, es un clásico. Solo quise regresar a algo que me gustaba mucho. Hay grandes películas de George Cukor, Jack Clayton y Hitchcock, como ‘Rebecca’”. Pero aunque la mansión de la historia tiene mucha importancia , Del Toro asegura que se trata de algo más que una casa embrujada. “A diferencia del género de las casas encantadas, en el romance gótico la casa es una extensión de los personajes, mientras que en aquellas la casa tiene una voluntad y una calidad moral maligna”, explicó.

El dato
>  La cinta es dirigida por Guillermo del Toro.
>  El director escribió el guión junto a Matthew Robbins, con quien ya había trabajado en “Mimic” (1997).
>  Cuenta con las actuaciones de Jessica Chastain, Tom Hiddleston y  Mia Wasikowska.
>  Junto a “El Espinazo del Diablo” (2001) y “El Laberinto del Fauno” (2006), el director considera que forma una especie de trilogía temática.
>  Una de sus influencias fueron los libros de Daphne DuMaurier.

Filmografía de Guillermo del Toro
> “Cronos” (1993)
> “Mimic” (1997)
> “El Espinazo del Diablo” (2001)
> “Blade II” (2002)
> “Hellboy” (2004)
> “El Laberinto del Fauno” (2006)
> “Hellboy II: The Golden Army” (2008)
> “Pacific Rim” (2013)