Masters of the Universe: Revelation de Kevin Smith usa la nostalgia de He-Man con precaución. Tanto es así que aunque los primeros episodios de la serie de Netflix guardan un parecido sorprendente con la versión clásica, también son… la introducción a un nuevo universo . Es un juego atrevido y un delicado equilibrio entre contar la historia familiar a una gran parte de la audiencia, pero también darle personalidad al programa.

Y Kevin Smith, fanático del personaje y su universo, lo logra. También demuestra que este clásico de la animación tiene todo el potencial para aportar algo fresco, espiritual y emocionante a cualquier audiencia nueva. La serie explora la conocida historia del poder y la nobleza de He-Man y la combina con todo tipo de personajes entrañables.

También es un viaje a un territorio inexplorado. Porque en lugar de ser una secuela, como se anunció, Masters of the Universe: Revelation es un reinicio. . Una versión renovada y detallada que deslumbrará a los fans adultos e interesará a los más jóvenes. Una apuesta arriesgada que podría haber hecho de la serie una repetición de un esquema anticuado o un nuevo look revolucionario. Pero Masters of the Universe: Revelation es dos cosas al mismo tiempo. Es una serie que está muy consciente de sus orígenes, y Smith tiene cuidado de que se conozca, y también es una producción sin precedentes.

Entre estos dos elementos, la historia hace más que superar lo que parecía ser su mayor obstáculo: una dependencia excesiva del material original. En particular, para gran parte del público, el hilo conductor fue. para volver a conectar con personajes antiguos y una trama familiar. . Kevin Smith lo sabe y está construyendo algo auténtico, poderoso y lo suficientemente entretenido como para tener vida propia.

Por supuesto, Masters of the Universe: Revelation también es una trampa de nostalgia. La historia es casi idéntica, punto por punto, a su homónimo hace casi treinta años. Tanto es así que incluso algunas réplicas son reconocibles. Basado en los personajes de Mattel y la serie animada. del mismo nombre, conserva todos los elementos que hicieron popular el material original.

Kevin Smith recreó el mundo rudimentario y, a menudo, básico del clásico He-Man, y decidió continuar la historia desde otra perspectiva. Pero como buen fan que es, también desarrolló un nuevo enfoque. Vuelve el príncipe Adam y todos los personajes que lo acompañaron. Y aunque la serie de Netflix conserva su identidad básica y un poco incómoda, también es una producción que se toma en serio a sí misma.

Quizás uno de los aspectos más queridos de Masters of the Universe: Revelation es cómo mantiene la historia original, pero también cómo le permite evolucionar y expandirse. Es un hábil juego entre dos puntos lejanos que se unen para contar las aventuras de Eternia. Pero el He-Man con la voz de Chris Wood que se enfrenta al villano Skeletor. (Mark Hamill) es complejo y es nuevo.

Lo mismo ocurre con el Archivillano, quien, gracias al trabajo vocal de Hamill, se vuelve peligroso en su falta de límites. Uno y otro se enfrentarán en un duelo de tensión que se vuelve cada vez más elaborado y consciente de sí mismo a lo largo de los episodios. E incluso ahí, Kevin Smith no pierde el sentido de crear un espectáculo homenaje. que tiene algo nuevo que ofrecer. Masters of the Universe: Revelation es un placer para los fanáticos, pero también una oferta tangible para los no fanáticos.

Varias de las novedades de Masters of the Universe: Revelation se centran en cómo Smith trata algunas de sus fortalezas. El príncipe Adam ya no es una versión indiferenciada de He-Man, sino un adolescente que atraviesa una gran transformación.

Puede parecer un pequeño detalle, pero a medida que avanza la serie de Netflix, ese pequeño giro se vuelve significativo. Lo mismo ocurre con la forma en que se muestra el mundo de Eternia, que también incluye una exploración bienvenida de la historia de Greyskull Castle.

En cuanto a las caras más familiares, todas están ahí. Pero quizás con nuevos puntos que puedan sorprender a la afición. Teela, interpretada por Sarah Michelle Gellar, es quizás la que atraviesa el cambio más obvio. Si bien ya era una guerrera a la que temer en la serie original, ahora tiene un objetivo propio que redefine por completo su significado.

Quizás uno de los más importantes en Masters of the Universe: Revelation es la banda de villanos de Skeletor. Beast Man y Evil-Lyn tienen su propia integridad. Kevin Smith toma la sabia decisión de hacer que el universo del bien y del mal sea más denso. a favor de la profundidad de los personajes.

Donde la vieja serie creó un patrón de peleas y enfrentamientos sin resolver, Masters of the Universe: Revelation se lo toma en serio. Y lo hace hasta tal punto que esta primera parte de cinco partes de la serie de Netflix es una visita más que satisfactoria a un mundo más grande.

Kevin Smith insistió durante toda la producción en que tenía un amor genuino por la serie original. Y no exageraba: Masters of the Universe: Revelation es un homenaje que también funciona como celebración de una producción bien construida. He-Man está de regreso, y está de regreso, con una asombrosa habilidad para saltar las trampas de la nostalgia y llegar a una nueva audiencia. Su mayor logro.