John Travolta Décadas de éxitos
Este año se cumplen exactamente 40 años desde que John Travolta protagonizó el primer éxito en el cine, con la película 'Carrie' y es también una buena excusa para empezar a festejar los 40 años que cumplirá su primera nominación al Oscar con 'Fiebre de Sábado Por la Noche', en el 2017, además del famoso musical de 'Grease', para el 2018. Tres clásicos del cine que sobrevivieron a las generaciones del VHS, el DVD y la más actual Netflix, con un actor que también supo conservar la fama a lo largo de toda su carrera.
- ¿Es un poco extraño el hecho de revivir cuarenta años de tu vida, en una pantalla de cine, con tantos éxitos en Hollywood?
- Es algo que me da mucho orgullo, porque yo también logro separarme como persona y actor. Puedo ser muy buen espectador para muchas de mis películas.
- ¿Cuál fue la película que marcó el mayor cambio en tu vida?
- Ah, ‘Fiebre de Sábado por la Noche’ porque fue la primera nominación al Oscar. En aquel momento había firmado contrato para hacer tres películas: ‘Fiebre de Sábado por la Noche’, ‘Grease’ y ‘Urban Cowboy’, mientras en televisión estaba haciendo la comedia ‘Welcome Back Kotter’. Era la primera vez que pasaba algo así, con un actor de televisión, con una popularidad incluso mucho más rápida que las de Clint Eastwood o Steve McQueen. Pero el éxito fue algo inesperado, que llegó al mundo entero como una tormenta. Después, vino el reconocimiento del Oscar… y supongo que cambió todo para mí y el cine, también. Fue justo después de ‘Mean Streets’ o las películas de Scorsese, pero mucho más comercial.
¿Se puede comparar tu fama de aquel entonces entre los adolescentes con la locura que hoy vive por ejemplo Justin Bieber?
- (Risas) Yo siempre me comprometí con la actuación, toda mi vida. Mi manager también era muy serio con mi carrera. En aquel entonces, todo lo que importaba era conseguir buenos trabajos para ser el mejor actor de cine. Por eso nunca le presté atención al fenómeno adolescente. Para mí, era más importante la visión de los personajes que podía llegar a interpretar, mucho más que la fama.
- ¿Pero cómo reaccionaban los fans en aquel entonces, sin Facebook, Twitter o Youtube?
- La gente se aparecía en mi casa o incluso adentro de un armario. Sí. Era una época diferente. Solamente en televisión, me veían 40 millones de personas por semana y el cine fue una explosión global, donde había muchos menos de nosotros con ese estilo de popularidad.
Del otro lado del puente Brooklyn que hizo tan famoso en 'Fiebre de Sábado por la Noche', John Travolta nació en Nueva Jersey, el 18 de Febrero de 1954 (Y no, no fue un sábado, fue un jueves). Con otros cinco hermanos, él también tuvo la suerte de tener en casa a la madre Helen Travolta que era maestra de teatro, después de haber sido actriz y bailarina. Ella fue quien lo inscribió a John en las primeras clases de actuación, baile y canto en Nueva York, cuando él ya soñaba con protagonizar una comedia musical. Apenas tenía 16 años cuando consiguió el primer trabajo profesional en el musical 'Bye, Bye Birdie' y en esa misma época también dejó los estudios para mudarse a Nueva York, a trabajar en las obras de teatro de verano o algunas publicidades de TV. A los 18, ya estaba protagonizando el soñado musical de Broadway, con la historia de amor de dos estudiantes que tuvo un título bastante famoso... 'Grease'. Todavía ni había pasado al cine, cuando consiguió el rol de Vinnie Barbarino en la comedia de televisión 'Welcome Back, Kotter', en 1975. Y apenas un año después, consiguió la primera nominación del Oscar con la película 'Saturday Night Fever' que impulsó el furor mundial de la música disco. Con la versión en cine de 'Grease' demostró que ya era la estrella más popular del momento, aunque no le importó desaparecer de las cámaras, hasta que volvió con el éxito de la comedia 'Look Who's Talking' que llegó a recaudar casi 300 millones de dólares. En esa misma época, conoció por primera vez a su actual esposa Kelly Preston, cuando juntos filmaron la película 'The Experts', aunque en aquel entonces, ella estaba en pareja con Charlie Sheen después de haberse divorciarciado del actor Kevin Gag. Recién al año siguiente del estreno de la segunda película de 'Look Who's Talking Too', John Travolta y Kelly Preston se casaron... por duplicado. La primera boda había sido con un ministro francés el 5 de Septiembre de 1991, pero al enterarse que no era considerada legal, volvieron a casarse oficialmente, el 12 de Septiembre de 1991, para tener después a los hijos Ella Bleu y Jett (que falleció durante una trágica vacación en las Bahamas, cuando apenas tenía 16 años).
¿Y tus hermanas también eran actrices?
- Sí. Mis hermanas se ganaban la vida con el teatro de Broadway. Y yo tenía doce años cuando empecé con la actuación y me uní al grupo. Éramos una familia del espectáculo. Mis hermanas actuaron con más de diez estrellas del momento y era algo común tener gente famosa en casa, todo el tiempo. Era muy diferente, todo.
¿Cuál fue la mejor lección que aprendiste de tu madre, como maestra de teatro?
- Ella era de la escuela de actuación que enseña a creer en los personajes, asumiendo la realidad. Enseñaba a construir un personaje en la forma que sintieras que podías construirlo. Y a mí me encantaba buscar los atributos de cada rol, imaginando como caminan, como hablan, como se ven y como piensan. Así me gustó siempre construirlos. Y dependiendo del personaje, siempre lo construí de una forma diferente.
Tu esposa, Kelly Preston contó que te conoció por primera vez cuando ella estaba por tomar una prueba de cámaras para la película 'The Experts' ¿Cuál fue tu reacción en aquel entonces?
- Primero que todo, para empezar, mi esposa (Kelly Preston) es la mujer más hermosa del mundo. Y fue amor a primera vista. El problema es que al principio ella estaba casada (con el primer esposo, Kevin Gage) y nos tomó algunos años cruzarnos. Pero lo logramos. Ella había estado excelente en la prueba de cámara y realmente se merecía el rol. Supongo que nos enamoramos durante esa película, pero teníamos un tema fuera de nuestro control, pero fuimos muy respetuosos de la situación y esperamos el tiempo apropiado.
¿Además de ser la copiloto de tu vida, alguna vez dejaste que ella volara alguno de tus aviones?
- Ella es maravillosa como asistente de vuelo y todo lo que ello implica. Incluso antes de estar juntos, cuando yo era jovencito solía pretender que tenía mi propio avión y a mis amigas de la cuadra las hacía vestirse con el uniforme de Girl Scout para pretender que eran azafatas. No cambié en nada (Risas). Yo tenía 30 años, cuando le pedí a Kelly Preston que se vistiera de azafata para invitarla a volar en avión. Y fue muy pero muy efectivo (Vuelve a reír). Kelly me impresionó muchísimo. Hace poco, como regalo, le edité un video de sus actuaciones y cada una de ellas era realmente impresionante. Deberías verlo. Cambia por completo con cada actuación. Es una actriz de verdad.
Cuando todos creían que John Travolta había perdido la popularidad, llegó la segunda nominación al Oscar y la película 'Pulp Fiction', marcó la segunda etapa de éxitos en su carrera. Apenas había cobrado 150.000 dólares por interpretar aquel rol de Vincent Vega, pero terminó ganando nada menos que 32 millones de dólares con las siguientes películas de 'Get Shorty', Broken Arrow', 'Phenomenon' y 'Michael', además de otros 40 millones, con la acción de 'Face/off' y 'Mad City'. Muy pocos lo saben, pero él también estuvo detrás de la voz original del dibujo animado de Disney 'Bolt', además de haber cantando con Miley Cyrus en la canción nominada de la misma película 'I Thought I Lost You'. Con la esposa Kelly Preston y la hija Ella Bleu, también protagonizó la película 'Old Dogs', antes de filmar 'Savages' con Oliver Stone y Salma Hayek. Y después de 40 años, aceptó el desafío de volver a la TV con la miniserie 'American Crime Story', para contar en diez capítulos la historia real del juicio de OJ Simpson, detrás del rol del abogado Robert Shapiro.
¿Volver a la TV con la miniserie sobre la historia de OJ Simpson fue una buena forma de homenajear el principio de tu fama con la TV?
- Me sorprendió muchísimo que me lo ofrecieran, pero me imaginé en ese personaje, como actor. Me siento mucho más cómodo en esa clase de actuación, donde tengo que cambiar bastante. Y cuando el director Murphy Ryan me ofreció el rol del abogado defensor Robert Shapiro, me tomé varios meses en considerarlo. Lo pensé, lo evalué y recién cuando ordené todas las piezas del rompecabezas, decidí que podía buscarle la forma de interpretarlo y cuando acepté, el verdadero Robert Shapiro me escribió una hermosa carta diciendo lo emocionado que estaba por representarlo.
- ¿Y tus otros personajes? ¿Cuál es el que te recuerda más la gente cuando te ve por la calle?
- ‘Grease’ fue otro fenómeno global. Al día de hoy todavía hay gente que paga 275 dólares para cantar vestidos como aquella época, durante la proyección especial en el Hollywood Bowl. Claramente es la película más popular de todas, pero cada una de ellas tuvo un momento especial para todos.
- Entre las nominaciones al Oscar de Fiebre de Sábado por la Noche y Pulp Fiction pasaron más de 15 años ¿Cómo fue aquel primer encuentro con Quentin Tarantino… que todavía no hayas contado?
- En realidad, él me había ofrecido la película de vampiros ‘From Dusk Till Dawn’ además de ‘Pulp Fiction’, pero yo no soy un gran amante de los vampiros. No me interesaba esa película y él se sorprendió por completo. Le dije que la otra me parecía mucho más interesante, como actor, para mí. Y después, supongo que él también decidió que ese tenía que ser el rol para mí. Así nos pusimos de acuerdo.
- ¿Pulp Fiction también cambió tu carrera por completo?
- ¡Mi Dios! Cambió todo, porque empezó con una nominación al Oscar que no solo me permitió vivir esa experiencia por segunda vez, también abrió la puerta para darme prioridad en los mejores guiones que ofrecían en ese momento. Fue una forma maravillosa de recuperar la visión de la carrera que yo había imaginado siempre. Por eso, Pulp Fiction fue tan importante.
- ¿Qué otros directores dirías que te tocaron con una varita mágica?
- Hay varias respuestas para esa pregunta. Quentin, seguro. Robert Altman, también. Y Brian de Palma también me dio la primera oportunidad primero con ‘Carrie’ y después con ‘Blowout’, que fue una película que también significó mucho para mí. Y Tony Scott es uno de los mejores directores con los que trabajé. El punto en común que todos tuvieron es la confianza que tenían en mí. Los mejores directores siempre confiaron en mí, asumiendo que soy buen actor para brindarles lo que ellos necesitaban. Eso me encanta. Todos esos directores son maravillosos.
- ¿El mejor consejo que recibiste?
- Los dos mejores consejos me los dio Marlon Brando. Fue un muy buen amigo mío durante los últimos cinco años de su vida y tuve la suerte de pasar mucho tiempo con él. Y uno de los consejos fue profesional, diciendo que nunca hiciera una película donde el director no estuviste realmente enamorado de mí, porque no suele funcionar. Y tenía razón, cuando lo veo en retrospectiva, porque las mejores actuaciones que tuve fueron con directores que estaban fascinados conmigo (risas).
- ¿Cuál fue el segundo consejo de Marlon Brando?
- Me dio otro consejo personal, diciéndome que no busque en la gente lo que no tienen ni pueden darme. Y fue como si Dios me hubiera hablado, porque era lo que yo siempre esperé de la gente, toda mi vida, hasta ese momento. Fue una lección muy personal que cambió mi vida, aquel día.
- ¿Qué consejos les das hoy, en tu caso, a los que recién empiezan?
- Básicamente, creo que los que tienen alma de actor no tienen otra elección que actuar. De verdad creo que no tienen elección. Lo harán en algún teatro comunitario, en alguna obra de teatro de verano, en cine o alguna publicidad. Los que tienen esa pasión, van a actuar sin importar al final del día como lo hagan, pero lo van a hacer igual. Eso es lo que yo sugiero. Que sigan haciéndolo y disfruten lo más que puedan, improvisando con amigos un par de horas, tal cual como si fuera una película de verdad. La creación es pura libertad. No trates tampoco de controlar demasiado la pasión, fijate bien lo que buscas pero no hay que olvidarse de disfrutarlo todo. El arte de vivir es tan importante como el arte que uno busca como artista.