Joan Laporta ganó, de manera contundente, las elecciones a la presidencia del Barcelona. A falta de conocerse datos oficiales, el que fuera máximo mandatario del club entre 2003 y 2010 se acercó a un 60 por ciento de los más de 57 mil votos emitidos (entre presenciales y por correo) en las que se convirtieron en las elecciones con mayor participación de la historia del club.

De acuerdo a un primer sondeo de TV3, Laporta habría superado el 58 por ciento de los votos, seguido del 31 por ciento de Víctor Font y un 9.3 por ciento para Toni Freixa. El sondeo, sin embargo, solo tenía en cuenta los votantes en el Camp Nou, no entrando ni los 20 mil 662 votos por correo ni, tampoco, los emitidos en las seis restantes sedes electorales divididas en Cataluña.

Laporta ya se sabía sería favorito desde primera hora de la mañana, lo que se denotó en su alegría durante toda la jornada, que contrastó con la seriedad de un Font que a medida que fueron pasando las semanas, comprendió que su proyecto no iba a poder hacer frente al carisma del vencedor.

El Barça, hundido socialmente, precisaba un cambio. Y lo que votó el socio azulgrana fue una auténtica revolución. Lo hizo en 2003, con un resultado magnífico, y así se entiende que lo ha vuelto a hacer en 2021.