Raúl Jiménez fue clave para arruinar la fiesta en el regreso de Alex Ferguson a Old Traford y el Wolverhampton empató a uno con el Manchester United. 

Los "Diablos Rojos" salieron inspirados por el regreso de su más grande técnico y durante los primeros minutos atacaron con todo su potencial ofensivo al Wolverhampton. 

El ataque rindió frutos a los 18 minutos cuando Pogba aprovechó un rechazo de la defensa para mandarle un pase a Fred que disparó de pierna derecha fuera del área. 

El gol animó al Manchester que trató de aumentar su ventaja antes del mediotiempo sin embargo la defensa de los "Wolves" se encargó de mantener el mismo marcador. 

Jiménez fue pujante en la delantera y puso en problemas a hombres como Smalling y Lindelof pero fue hasta el minuto 53 cuando el mexicano apareció.

Recibió un balón de espaldas en el área chica y en lugar de disparar al a portería prefirió dejarlo a Joäo Moutinho que remató para vencer a De Gea. 

Los "Wolves" pudieron hacer la maldad si no fuera por las intervenciones del arquero español. 

El Wolves tuvo la victoria en el último instante en una cabalgada de Adamá Traoré, que no supo definir y pudo haber desatado aún más la tormenta que planea sobre el lado rojo de Manchester.

El Manchester sigue sin convencer y es quinto pero podría caer al sexto en caso de que el Tottenham obtenga la victoria mientras que el Woverhampton es décimo pero con un punto menos que el United.