Usted está aquí
Jeep Wrangler vs. el tiempo
CDMX.- En los automóviles, el correr del tiempo es un concepto complejo. Existen vehículos hechos para alcanzar una velocidad específica en pocos segundos. Otros están pensados para ser atesorados durante años, con la esperanza de que se vuelvan clásicos. Al pasar de los segundos y los años, el conjunto de vivencias que forman el presente puede escaparse. Es común conocer que alguien pasa por “la crisis de la edad madura” y con tal motivo se hace de un convertible. Al adquirir estos vehículos en ocasiones el usuario puede estar tratando de detener el paso del tiempo, pero ¿qué alternativas hay para escapar de este ritual moderno con algo que de verdad nos identifique como personas?
CATARSIS TODOTERRENO
Para quienes conocen las ventajas terapéuticas de los recorridos en un todoterreno, la crisis de la edad madura es algo ajeno, que existe pero les pasa a otros, como las plagas de langostas o las tormentas de nieve. Y es que el gran ícono del 4x4, Jeep, funciona como un repelente a esas tensiones del alma que en ocasiones empujan a decisiones abruptas. El protagonista de esta marca, el veterano Wrangler, llega a nuestro mercado en su más reciente generación.
La reflexión del lanzamiento de esta generación de Jeep Wrangler es que los pretextos para conducir uno de estos modelos y disfrutar de las maravillas de nuestro País no pueden quedarse para siempre en un futuro promisorio.