Interrumpen en Informe Municipal el mensaje de Gobierno Estatal

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Interrumpen en Informe Municipal el mensaje de Gobierno Estatal

Héctor García / Vanguardia
“¡La deuda, la deuda!”, fue algunas de las consignas que se alcanzaron a escuchar entre los gritos de los manifestantes

Al asistir como representante del gobierno del estado al segundo informe de Isidro López Villarreal como alcalde de Saltillo, el Secretario de Fiscalización y Rendición de Cuentas, Jorge Verástegui Saucedo, fue interrumpido en varias ocasiones por una parte de los presentes en el Teatro de la Ciudad, rechiflas y aplausos que buscaban la conclusión de su discurso generaron una evidente molestia del titular de la Sefir. 

Luego de que el edil concluyó su informe, el siguiente punto del orden fue la intervención de Verástegui Saucedo para dar a conocer el mensaje por parte de la administración estatal, por lo que subió al escenario. 

Jorge Verástegui comenzó su discurso reconociendo los alcances de la administración municipal y resaltó la importancia de que haya una buena coordinación entre los tres niveles de gobierno, posteriormente dejó entrever algunos logros del gobierno estatal. 

Héctor García / Vanguardia

Sin embargo cuando el Secretario de Fiscalización llevaba poco más de cinco minutos de mensaje, comenzaron algunas rechiflas y consignas por parte de algunos de los asistentes, los cuales pronto encontraron eco en otros más. 

“¡La deuda, la deuda!”, fue algunas de las consignas que se alcanzaron a escuchar entre los gritos de los manifestantes cuando comenzaron a escuchar calificaciones crediticias que, a decir del Secretario, ha recibido la entidad en el tema de finanzas públicas, así como cifras de empleo e inversión recibidas.  

Estas expresiones llegaron a un punto que generó molestia entre el funcionario público quien, con un ademán pidió el apoyo del alcalde Isidro López, quien se acercó de nuevo al micrófono. “Por favor permitamos al Secretario continuar con su mensaje”, dijo el edil. 

Aunque López Villarreal continuó solicitando cordura haciendo ademanes con sus manos en señal de calma, las expresiones se repitieron en al menos dos ocasiones e incluso la última parte del mensaje casi no fue percibida. Al final del evento Verástegui Saucedo abandonó el recinto por una de las puertas laterales.