Representantes del sector privado demandan mayor coordinación de autoridades por los recientes hechos de inseguridad, y piden a los ciudadanos denunciar cuando se vean afectados.

El empresario Rodolfo Garza Villarreal dijo que hay preocupación entre la IP por el riesgo de que regresen situaciones como las de 2013. Añadió que es muy importante la pronta intervención estatal y municipal para atrapar a las bandas delictivas.

“Es un tema que deben trabajar en conjunto las autoridades haciendo a un lado el tema partidista y poniéndose al lado de los ciudadanos para atender el problema. No podemos permitirnos un ‘regresar al año 2013’”, indicó.

Agregó que se debe seguir atacando el narcomenudo, sobre todo en escuelas, porque es donde puede iniciar el consumo, así como discotecas y bares como puntos naturales de distribución.

Garza Villarreal recordó que la inseguridad del pasado en el país generó migración de familias de unas ciudades a otras. Por ejemplo, Qurétaro se convirtió en la ciudad más segura para vivir y atrajo familas de Tamulipas, Monterrey y Torreón, entre otras.

Pero no llegaron solas las familias, sino acompañadas de un boom económico que se tradujo  en inversiones para ese estado, lo cual se perdió en estados de donde eran originarias.

Por su parte, el director de la Canaco Saltillo, César Valdés Ramos, dijo que una realidad local es que hay secuestros. La semana pasada, en una reunión con la PGJE, se reconocía que hubo 2 secuestros, sólo en uno de ellos ya se detuvo a la banda.

Comentó que debe aceptarse que existe el problema, es algo en lo que deben trabajar las corporaciones e incrementar la vigilancia, optimizar recursos y los ciudadanos denunciar.
Valdés Ramos comentó que la prevención también es imporante. Destacó que en el Manual de Autoprotección y Recomendaciones Preventivas que en 2012 realizó la cámara, en lo referente a la “Seguridad Antisecuestro” las recomendaciones eran no comentar los éxitos financieros, económicos o de negocios, pedir a las personas más allegadas guardar discreción sobre aspectos económicos, sociales y familiares; no ser predecible y evitar ser rutinario en la vida cotidiana.

Además de no colocar calcomanías en el vehículo que muestren información familar como cantidad de hijos, sexo, escuelas en las que estudian o preferencias de equipos deportivos, entre otras.