Los nachos son una aportación de Piedras Negras para el mundo. Por eso es que la Dirección de Turismo de esta ciudad fronteriza levantará un monumento dedicado a Ignacio Anaya, el inventor de este platillo tan peculiar.

La obra, que está contemplada dentro de los trabajos de remodelación del Mercado Zaragoza, será realizada por el escultor Armando Luna y medirá tres metros.

El propósito es rendir un homenaje a quien en 1943 inventó este antojito que cambió el concepto de las botanas en el mundo.

ORIGEN E HISTORIA
La historia cuenta que en Piedras Negras, en un pequeño restaurante llamado El Moderno, llegaron varias esposas de militares estadounidenses después de haber cerrado el restaurante, entonces el mesero, Ignacio Anaya, les preparó un platillo con lo poco que tenía: totopos y queso.

Una de las personas preguntó, “¿Cómo se llama?” (el platillo) el mesero pensó que le preguntaba su nombre y respondió “Nacho” y así fue bautizado este producto que fue incrementando su fama. Cuando la gente quería el platillo, sólo decía “quiero unos nachos”.

El dato
> De acuerdo con el boceto, la escultura es una estatua de cuerpo completo de don Ignacio Anaya sirviendo una charola de nachos.