HOUSTON.— El gobernador de Luisiana se ofreció el martes a recibir en su estado a texanos damnificados por Harvey, mientras que las autoridades de Houston planean abrir dos o tres refugios adicionales para dar albergue a las personas que continúan llegando al Centro de Convenciones George R. Brown, cuya capacidad ya ha sido rebasada.

El gobernador John Bel Edwards dijo que prevé que las autoridades de Texas decidan dentro de las próximas 48 horas si aceptar o no su oferta, que se presenta mientras Luisiana también ayuda a sus propios residentes que fueron rescatados durante la noche de las inundaciones provocadas por Harvey. Alrededor de 500 personas fueron evacuadas durante la noche del lunes y la mañana del martes de vecindarios inundados en el sureste de Luisiana, y unas 200 pasaron la noche en refugios de la zona, indicó Edwards.

El centro de convenciones en Houston ya recibió a más de 9.000 personas, casi el doble de lo que las autoridades habían previsto originalmente en el lugar, según el alcalde Sylvester Turner. Entre los refugiados había muchos de zonas ajenas a Houston.

“No rechazaremos a nadie. Pero significa que necesitamos expandir nuestras funciones y nuestra capacidad”, dijo Turner. “La ayuda está en camino”.

Más de 17.000 personas han buscado acomodo en los refugios de Texas, y lo más probable es que la cifra aumente, aseguró al Cruz Roja Estadounidense.

Además el martes, el teleevangelista Joel Osteen abrió como refugio su enorme iglesia de Houston, una antigua arena deportiva con capacidad para 16.000 personas que fuera casa de los Rockets de Houston de la NBA, después de varias críticas en redes sociales en donde lo acusaron de no ofrecer resguardo a las personas necesitadas durante las inundaciones.

Osteen anunció su esfuerzo vía Twitter, al indicar que él y su esposa Victoria Osteen “nos preocupamos por los houstonianos”.

Voluntarios y donantes hicieron fila a las afueras del Toyota Center, la arena en el centro de la ciudad que es la casa actual de los Rockets, previendo que sea uno de los nuevos refugios. Y aunque se espera que se den a conocer los detalles de los nuevos refugios durante el martes, Charles Maltbie, administrador de refugios de la Cruz Roja, dijo que los voluntarios han realizado una “inspección preliminar” en el Toyota Center y trabajan para configurarlo para los evacuados.

Turner dijo que la ciudad solicitó más provisiones a la Agencia Federal de Manejo de Emergencias, incluyendo catres y alimentos, para 10.000 personas adicionales, y espera que la ayuda llegue a más tardar el miércoles.

Además el martes, las autoridades de Houston confirmaron que un agente de policía de 60 años se ahogó dentro de su patrulla al quedar atrapado en una inundación en su camino al trabajo. El sargento Steve Perez había sido miembro del departamento durante 34 años.

El presidente Donald Trump visitó Texas el martes, y la Casa Blanca dijo que sus escalas en Corpus Christi y Austin tienen la intención de resaltar la coordinación entre todos los niveles del gobierno y sentar las bases para lo que se prevé sea una prolongada recuperación después de la tormenta.

Trump viajó acompañado de los secretarios de salud y servicios humanos, y de vivienda y desarrollo humano, así como el jefe de la Agencia Federal para el Desarrollo de la Pequeña Empresa.

La tormenta continúa causando estragos pese a que el pronóstico meteorológico mejoró ligeramente.