“Yo me voy contigo”, “no me dejes sola”, decía arrodillada y con lágrimas en los ojos Irene Balderas Cerda, de 95 años, quien tuvo que ser llevada al médico porque le subió la presión a más de 200 luego de ver a su marido sin vida en la acera de su domicilio.

Y es que a las 09:30 horas de ayer lunes, Fidel Bocanegra Valdez, de 95 años, salió de Catamarca 334 de la colonia Buenos Aires con su andadera y se dirigió a su camioneta, como lo hacía regularmente iba a dar una vuelta. El hombre abrió la puerta de la Chevrolet Venture; sus hijos y vecinos lo vieron salir y se les hizo normal, ya que no era la primera vez que lo hacía.

Pero algo inusual pasó, solo se escuchó abrir la puerta y un fuerte golpe, ya que Fidel había caído al piso. Vecinos y familiares fueron de inmediato en su ayuda, y mientras unos trataban de hacerlo reaccionar, otros dieron aviso al número de emergencias, 911, de donde se canalizó la llamada al cuerpo de bomberos.

Fueron paramédicos de los Bomberos de la Estación Sur quienes se encargaron de atender el servicio, a pesar de lo cerca y rápido que llegaron, no hubo nada que hacer, la persona ya no contaba con signos de vida.

El llanto y desesperación por parte de Irene no se hizo esperar, en repetidas ocasiones se agachó a ver a su “viejito” como ella le decía, pero no había nada que hacer; sus hijos tuvieron que llevársela.