El palacio Soestdijk en el que residieron la reina Juliana de Holanda y el príncipe Bernardo será subastado en abril de 2017, informaron las autoridades en La Haya.

Para la subasta han sido aceptadas tres opciones que presentaron proyectos de renovación del palacio, situado en la provincia de Utrecht. Entre las ideas figura adaptar el recinto a un área de ocio que incluya oferta gastronómica y deportiva o crear allí viviendas de lujo.

El príncipe Bernardo, de origen alemán, fue el último inquilino del palacio de Soestdijk, donde vivió hasta su muerte, en diciembre de 2004. Meses antes, en marzo, había fallecido su esposa, la reina Juliana.

Su nieto es el actual rey Guillero Alejandro. Desde 1971, el palacio es propiedad estatal y, debido a su estado y la urgencia de una renovación, desde 2007 no puede visitarse.