La riqueza en flora y fauna de Zapalinamé es inmensa ya que su ecosistema es una fusión entre la Sierra Madre Oriental y el Desierto Chihuahuense. Estas condiciones naturales hacen que algunas plantas y animales se desarrollen únicamente en esta zona, es decir son endémicos. Y aunque parece sorprendente hay peces en la sierra, se encuentran registradas tres especies nativas, pero actualmente sólo se ha encontrado una de ellas: la carpa de Saltillo, de nombre científico Gila modesta. Es un pequeño pez de agua dulce que vive en los escasos cuerpos de agua superficial que hay en Zapalinamé.

Tiene un cuerpo delagado de color gris con una banda más ocura en cada uno de sus costados. Vive en el arroyo Los Chorros, en pequeñas pozas y charcos de agua clara con corrientes moderadas de profundidad entre uno y dos metros. Se alimenta principalmente de pequeños insectos y otros pequeños anfibios, alcanza un tamaño entre 15 y 20 cm. 

Hay también escasas investigaciones sobre esta especie, en el año 2000 se estimó una población de tres mil a cuatro mil ejemplares. La carpita de Saltillo se encuentra en el listado de especies en peligro de extinción según la Norma Oficial Mexicana 059-SEMARNAT-2010 y también en la Lista Roja de la Unión Internacional ara la Conservación de la Naturaleza como especie en Peligro Crítico. La alta vulnerabilidad de la zona a los impactos del cambio climático, la contaminación y alteración del ecosistema ha afectado gravemente su hábitat. 

Conservar un zona natural tan grande es una tarea inmensa que conlleva mucho esfuerzo y recursos institucionales, económicos y humanos.  Cuidar los pocos espacios de agua superficial que tenemos en la región es fundamental no sólo para la carpita, si no para el equilibrio y preservación de todo el ecosistema. Las tareas que se llevan a cabo actualmente se enfocan en restauración ecológica y conservación para reducir la erosión del suelo por fenómenos climatológicos extremos. 

Si visitas el arroyo de Los Chorros o cualquier área de Zapalinamé, no contamines, no dejes basura, conservar limpio y lo menos alterado el entorno es muy importante para no afectar más a la Carpita de Saltillo. Contribuye a la conservación de la biodiversidad, para que las carpitas de Saltillo puedan seguir viviendo en Zapalinamé y evitar su extinción, es una especie única en el mundo que sólo vive aquí.