La falta de políticas públicas prometedoras para una vida digna y la violencia que impera en diversos países del mundo, provocó durante 2019 el desplazamiento forzado de por lo menos 79.5 millones de personas cuya lucha es recordada este 20 de junio en el Día Internacional del Refugiado.

Durante las últimas décadas, Saltillo se había ido socializando con el éxodo centroamericano. Decenas de miles de migrantes pasaban por la ciudad en busca de conquistar el sueño americano... las cosas han cambiado.

A partir de 2016, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados en contacto con la Casa del Migrante de Saltillo, identificó que en los últimos años la población migrante, no solo estaba huyendo por cuestiones económicas, sino por latentes riesgos hacia su integridad; el dinero pasó a un segundo plano.

Para esas fechas, junto con el Municipio, las organizaciones acordaron aplicar en Saltillo un programa piloto que funcionara como una opción para todas las personas que habían huído de sus países, con el fin de darles una nueva oportunidad otorgándoles el refugio, que está establecido en los tratados internacionales fortalecidos tras la Segunda Guerra Mundial.

Firmado en agosto de 2016, a casi 4 años de su implementación, el ACNUR, la Casa del Migrante y las autoridades municipales, han aplicado el programa a 2 mil 62 personas extranjeras que en su mayoría ya fueron reconocidas por las autoridades bajo la condición de “refugiado”.

De acuerdo con los datos del ACNUR en Saltillo, el 57 por ciento de las personas que han llegado hasta esta capital es de Honduras, el 31 por ciento de El Salvador, el 4 por ciento de Guatemala y el resto se divide entre Cuba, Nicaragua.

Los informes de la propia agencia de la ONU, indican que a todas las personas que llegaron hasta aquí, les fue aplicado el vínculo laboral, y actualmente, el 73 por ciento se encuentran trabajando dentro de los campos industriales en un 47 por ciento, al igual que en el de los servicios, mientras que en la construcción y otras áreas se encuentran el resto.

Aunque Saltillo fue la primera ciudad en adoptar el modelo, ACNUR tiene registros de que las ciudades donde hay más población refugiada son en Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey; sin embargo, al día de hoy, la oficina, dice que la sociedad ha tenido buena aceptación hacia dicha población, y sobre todo en el área laboral han sido adecuadamente aceptados, como en la empresa Mabe, que fue visitada por el representante del ACNUR en México, Mark Manly para observar el programa.

EL DATO

2,062  personas  se encuentran en calidad de refugiadas en Saltillo.