Hasta refrigeradores arrojan a los arroyos en Saltillo

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Hasta refrigeradores arrojan a los arroyos en Saltillo

Insalubridad. Sillones y otros muebles son encontrados en los arroyos. / Luis Salcedo
Convierten vecinos cauces en gigantescos basureros

Refrigeradores, salas y hasta televisores arrastraron las lluvias a principios de semana, basura que algunos ciudadanos se han encargado de regar —sobre todo— en los arroyos del oriente de la ciudad, señaló el director de Servicios Primarios.

Martes y miércoles por la mañana fue necesaria la colaboración de 450 trabajadores en Servicios Primarios para limpiar la ciudad de todo residuo arrastrado por la lluvia.

Refrigeradores, sillones y hasta televisiones es lo que la gente arroja a a los arroyos del oriente de la ciudad”
Isidro Aguirre, titular de Servicios Primarios

Isidro Aguirre, director del departamento de Servicios Primarios, reconoció la colaboración del Sindicato de Trabajadores de Limpieza con quienes entabló una conversación exponiendo diferentes tareas por realizar con el objetivo de limpiar la ciudad.

“La basura fue menor que en años anteriores, no hubo desborde de arroyos, no fue una labor tan compleja por la limpieza que se había dado antes”, informó el director de la dependencia. 

Peligro. Toneladas de basura arrastra el agua en los arroyos, lo que provoca que se desborden

Desde el lunes por la tarde cuadrillas de limpieza salieron para apoyar el flujo del agua, limpiando zonas con acumulación de basura; toda labor fue suspendida alrededor de las 22:00 horas por seguridad de los trabajadores.

Entre 52 camiones y 450 trabajadores se encargaron de recoger objetos fuera de lugar, de acuerdo con el director fue en los arroyos de la zona oriente de la ciudad donde se encontraron elementos de mayores dimensiones.

Desechos. Escombro y basura de todo tipo son arrojados por los vecinos de la colonia Federico Berrueto al arroyo las Víboras.

“Refrigeradores, sillones y hasta televisiones es lo que la gente más tira a los arroyos del oriente de la ciudad”, refirió, recalcando que en esta ocasión los trabajadores no se toparon con tanto muebles como en años anteriores ocurrió.

Aguirre lamentó que la cultura de algunos ciudadanos continúe siendo arrojar muebles hacia el fondo de arroyos con el objetivo de deshacerse de ellos.