Hasta el momento, dos sacerdotes de la Diócesis de Saltillo han fallecido a causa del COVID-19: el padre Pedro Pantoja Arreola, fundador de la Casa del Migrante en Saltillo, y José Gilberto Soto, vicario de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, en Ciudad Frontera.

Son alrededor de 18 casos confirmados de curas contagiados de la enfermedad, entre ellos el obispo Raúl Vera López, quien en octubre pasado informó que dio positivo al SARS-CoV-2.

El 10 de diciembre, la Casa del Migrante de Saltillo dio a conocer que a una semana de haber iniciado con los síntomas, el padre Pantoja se encontraba delicado debido al COVID-19.

Sin embargo, el querido sacerdote falleció el 18 de diciembre, luego de permanecer internado poco más de una semana y al cuidado de sus familiares.

Antes, el 27 de noviembre, había fallecido Soto Arroyo, también a causa de complicaciones de COVID-19.

El religioso, que contaba con 35 años de edad, comenzó a presentar síntomas de la enfermedad desde el pasado 13 de noviembre, por lo que fue aislado en su dormitorio.

Sin embargo, con el paso de los días, se agravaron sus síntomas, por lo fue trasladado a la clínica 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social de Monclova donde permaneció hospitalizado hasta su deceso.