Hacen prótesis para víctimas de cáncer de mama

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Hacen prótesis para víctimas de cáncer de mama

Apoyo. Voluntarias de Soy Rosa IMSS fabrican prótesis de seno para mujeres que enfrentaron una mastectomía.
Advierten a mujeres sobre la importancia de revisarse y acudir al médico
Cualquier mujer que requiera de una prótesis, puede venir y pedirla”.
Nancy Leticia Vega, Soy Rosa IMSS.

CDMX.- El ruido que hacen las semillas de linaza al contacto con las manos de las voluntarias del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es lo único que se escucha en un cuarto con paredes rosadas. La docena de mujeres que usan un babero amarillo, gorro, cubrebocas y guantes tratan de impregnar amor y respeto en esos granos, los cuales más tarde se convertirán en prótesis de mama.

Ayer se conmemoró el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, enfermedad por la que mueren en promedio 17 mujeres al día en México. Por ello, uno de los principales retos es lograr diagnósticos tempranos. Especialistas llaman a realizar la autoexploración mensual y lamentan que sólo cuatro de 10 mujeres realicen esta práctica.

“A partir de la primera menstruación una mujer se deberá realizar la autoexploración de forma mensual, entre el séptimo y el décimo día de iniciado el sangrado.

“Además, en la posmenopausia se debe hacer un día fijo para el chequeo, ésa es una manera de alcanzar un diagnóstico temprano”, explica Nereida Esparza, cirujana oncóloga del Servicio de Tumores Mamarios del Instituto Nacional de Cancerología (Incan).

Agrega que a partir de los 21 años hay que acudir al médico para realizar una exploración clínica de rutina al menos una vez al mes, y a los 25 años, de manera anual. Los estudios de tamizaje como la mastografía se hacen en toda la población vulnerable; lo indicado es a partir de los 40 años.

“Un gran problema es que las mujeres no conocen su cuerpo; incluso después de haber pasado por este cáncer dejan de revisarse. Es vital que una mujer se conozca, se toque, que acuda con un médico para que la revise, porque, de otra manera, las campañas no darán resultados nunca”, comenta.

AYUDA INTEGRAL

Nancy Leticia Vega Cruz, coordinadora del programa Soy Rosa IMSS, destaca que estas prótesis artesanales buscan mejorar la calidad de vida de las mujeres que tuvieron como línea de tratamiento una mastectomía.

También brindan pláticas sobre autoexploración, signos de alarma y para favorecer su bienestar físico, sicológico, emocional y social.

“Cualquier mujer que requiera de una prótesis, sin importar si es derechohabiente o no, puede venir al voluntariado y pedirla, es una hermosa experiencia. Nueve de cada 10 mujeres se van con su pieza de semillas de linaza ya puesta”, resalta.

Vega Cruz relata que en promedio 10 personas participan en los talleres de elaboración de prótesis y en un día se hacen alrededor de 50. Cualquiera mayor de 16 años puede colaborar, sólo es necesario consultar la página de Facebook del voluntariado y acudir a la sede que está en Centro Médico Nacional Siglo XXI.

“A nivel nacional tenemos 2 mil 500 voluntarios, nuestra meta es capacitarlos para que en todas las entidades hagan y entreguen prótesis. Queremos llegar a cada rincón del país para la mujer que lo requiera”, finaliza.

 ‘Un seno no me define como mujer’

5,500  mujeres se han beneficiado con las prótesis artesanales de linaza

CDMX.- Hace dos años que Andrea Luna al autoexplorar su seno derecho sintió una inflamación. Pensó que era normal o que quizá su hija la había pateado; sin embargo, un mes después se percató de que la hinchazón no se quitó y fue al médico. Luego de un mes le dieron la noticia: tenía cáncer de mama en una etapa avanzada.

Debido a que la enfermedad de Andy, como le gusta que le digan, estaba avanzada, le realizaron una mastectomía radical del seno derecho.

“En esos momentos me di cuenta de que un seno no me define como mujer y que si quitármelo me permitiría seguir con vida, pues pensé: ‘Adelante, que me lo extirpen’”, menciona.

A pesar de que ella no se sintió mal por la pérdida de su pecho derecho, cuando una amiga le llamó para decirle que ya tendrían su prótesis, no pudo evitar emocionarse.

“Me dijo que viniéramos al programa Voluntariado IMSS y que nos darían una prótesis. Lo más bonito fue cuando supe que son artesanales, que otras personas vienen y las hacen con sus manos, con todo su amor”, señala.

El día que Andy llegó a Voluntariado IMSS salió con su prótesis puesta y pasó a ser una de las 5 mil 500 mujeres que han sido beneficiadas con las piezas hechas a base de semillas de linaza, desde que surgió la iniciativa en 2017.