México.- A Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), no le es tan indiferente llegar a la Presidencia en 2024.

En entrevista con Proceso, manifestó su gusto por la política a la cual podría integrarse luego de que termine en diciembre su periodo (uno más) como líder de los patrones de México.

“No es vergonzante que un ciudadano, llegado el momento, pueda transitar a lo público”, dijo. 

Ni me encarto ni me descarto

En la plática con Álvaro Delgado, el abogado bajacaliforniano dice que quiere ser un buen presidente de la Coparmex hasta el último día.

Y tras cuatro periodos consecutivos como dirigente del organismo, su pretención es continuar activo en la vida pública del país, por lo que cuestionado sobre si le gustaría ser presidente de la República, tajante asevera:

"No he tomado una decisión de futuro, pero ni me encarto ni me descarto", agregó. 

Cancelación de Santa Lucía y Dos Bocas

De Hoyos, quien ha sido un ferviente crítico del presidente Andrés Manuel López Obrador, tiene en su mente lo que trataría con el primer mandatario si éste le concede una audiencia:

Cancelar el aeropuerto de Santa Lucía, así como la refinería de Dos Bocas, Tabasco, aunque, sobre todo le haría un llamado a que evite la polarización y convoque a la unidad.

Considera que López Obrador tiene "una gran oportunidad, con su popularidad, con su legitimidad de origen, de llamar a la concordia y reconocer, como lo hacen los jefes de Estado, que hay decisiones que aunque son de buena fe, a veces no dan los resultados, y ponerse en el lado correcto”.

Postura crítica y de buena fe 

A inicios de diciembre de 2018, cuando De Hoyos Walther fue ratificado para continuar en la presidencia de la durante el ejercicio 2019, llamó a los empresarios a estar atentos al actuar del gobierno federal 2018-2024.

Pidió apoyar y acompañar decididamente las acciones que vayan encaminadas al beneficio de los ciudadanos, las empresas y el país.

Asimismo, exhortó a mantener una postura crítica, de buena fe y siempre propositiva respecto a aquellas políticas públicas que sean perjudiciales para el desarrollo económico, la cohesión social o la fortaleza de la democracia y las libertades.