El Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala notificó la tarde de este viernes a la embajada de México en esta capital, que el gobierno mexicano dispone de 60 días para presentar la solicitud formal de extradición del político Javier Duarte de Ochoa, detenido el sábado anterior en el suroccidente del territorio guatemalteco después de seis meses en fuga.

Los documentos fueron entregados a las 15:40 horas locales (16:40 en el centro de México) por un emisario de la cancillería guatemalteca en la oficina de recepción de correspondencia de la embajada. La papelería fue depositada a las 14:40 horas de hoy por un mensajero de la Secretaría de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala ante la cancillería, que con rapidez dio continuidad al proceso para lograr que 60 minutos después ya estuviera en la delegación diplomática mexicana.

Con esa notificación, y de acuerdo con el tratado de extradición suscrito en 1997 por México y Guatemala y ratificado en 2005, el plazo empezará a correr el próximo lunes, que será el primer día hábil posterior a la entrega. El tiempo vence el 7 de julio de 2017 y, según advirtió la cancillería a la embajada, si en ese periodo no se cumple con el requisito, Duarte será liberado.

El siguiente movimiento tendrá que ser ejecutado por México, con la presentación a Guatemala de la solicitud formal de extradición que acrediten las pruebas correspondientes de que Duarte debe enfrentar a la justicia mexicana porque se le atribuyen los presuntos delitos de delincuencia organizada y de operaciones con recursos de procedencia ilícita que habría cometido durante su gestión como gobernador de Veracruz, de 2010 a 2016.

Según los procedimientos, la petición formal será entregada por la embajada mexicana a la cancillería guatemalteca, que la remitirá a la Secretaría de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala, que a su vez la transferirá al Tribunal Quinto de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente, que es el que conduce el caso.

El pasado miércoles por la tarde, y al comparecer ante el Tribunal, Duarte rechazó la opción preliminar de “allanarse” para ser extraditado a México y decidió que, con la condición de conocer primero la solicitud formal de extradición que deberá entregar el gobierno mexicano a Guatemala, se reservó el derecho de acogerse después a un trámite expedito para ser repatriado y sometido a la justicia de su país.

La resolución sobre el caso de Duarte, detenido, pero con carácter provisional a solicitud de México con fines de extradición el sábado pasado en el municipio de Panajachel, en el suroccidente de Guatemala, tras seis meses en fuga, fue dictada el miércoles anterior en la tarde por el tribunal, presidido por el abogado guatemalteco César García, en una audiencia con participación del ex gobernador, de sus defensores y de la Fiscalía General (Ministerio Público) de Guatemala.

Duarte continúa encarcelado en Matamoros, una prisión militar de esta capital a la que ingresó en la madrugada del pasado domingo.