Gbabgo y Blé Goudé se declaran no culpables de crímenes contra humanidad

Usted está aquí

Gbabgo y Blé Goudé se declaran no culpables de crímenes contra humanidad

El expresidente de Costa de Marfil Laurent Gbagbo. Foto EFE
La fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Fatou Bensouda, aseguró hoy que su oficina dispone de una "vasta" cantidad de pruebas contra el expresidente de Costa de Marfil Laurent Gbagbo.

El expresidente de Costa de Marfil Laurent Gbagbo, y su ministro de Juventud, Charles Blé Goudé, se declararon hoy no culpables de crímenes contra la humanidad cometidos en el contexto de la ola de violencia postelectoral en el país africano durante 2010 y 2011.

El juez Cuno Tarfusser, que preside el juicio que se abrió hoy en la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya, preguntó a ambos acusados si habían comprendido los cargos de los que se les acusa, y tras una afirmación positiva les pidió pronunciarse sobre su culpabilidad o no culpabilidad.

Ambos, con voz firme, se declararon "no culpables" de los cuatro cargos de crímenes de humanidad presentados por la Fiscalía: asesinato, o en su alternativa intento de asesinato, de violación, de otros actos inhumanos y de persecución.

Durante la lectura de los cargos ambos acusados se mostraron tranquilos y Laurent Gbagbo apenas gesticuló, mientras que Charles Blé Goudé tomó notas en todo momento.

La acusación se refiere a lo sucedido entre el 16 de diciembre de 2010 y el 12 de abril de 2012 en Costa de Marfil, cuando Gbagbo quiso mantenerse en el poder pese a haber perdido las elecciones presidenciales frente a Alassane Ouattara en 2010.

En esos tumultos murieron unas 3.000 personas, según la ONU.

El alto tribunal de la ONU acusa a Gbagbo de haber diseñado e implementado con su círculo más cercano un "plan común" para mantener al expresidente marfileño en el poder "con todos los medios" y mediante ataques "extensivos" contra las personas que consideraban partidarias de Ouattara.

La Fiscalía sostiene que Gbagbo ejerció el "mando, el control y la autoridad" sobre las fuerzas de seguridad y de defensa, así como sobre los jóvenes y mercenarios que fueron reclutados para reprimir a la población civil.

Era consciente de que el objetivo era la población civil y además aseguraba a los jóvenes movilizados que no serían castigados por los actos que cometerían.

Blé Goudé formaba parte del círculo más cercano del expresidente marfileño y sirvió de vínculo con la juventud "pro-Gbagbo" a la que movilizó con un esfuerzo continuado.

En su alegato inicial, la defensa de Laurent Gbagbo alegó que la Fiscalía no ha reunido suficientes pruebas para demostrar la culpabilidad del expresidente de Costa de Marfil y que por eso sigue en la actualidad con las investigaciones.

Al mismo tiempo, acusó a la fiscal general, Fatou Bensouda, del caso de ignorar evidencias que podrían ser exonerantes para el exmandatario marfileño.

Fiscalía de la CPI asegura que tiene numerosas pruebas contra Gbagbo

La fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Fatou Bensouda, aseguró hoy que su oficina dispone de una "vasta" cantidad de pruebas contra el expresidente de Costa de Marfil Laurent Gbagbo, acusado de crímenes contra la humanidad junto con su ministro de Juventud, Charles Blé Goudé.

"Tenemos una vasta cantidad de pruebas contra los acusados. Nos hemos reunido con numerosas personas, entrevistado a muchos testigos, seleccionado miles de documentos y consultado a muchos expertos", declaró la fiscal en el turno de alegatos de la Fiscalía durante la apertura del juicio contra Gbagbo y Blé Goudé.

La lista de testigos contra los acusados incluye actualmente a 138 personas, indicó.

"Escucharemos a víctimas y testigos de los crímenes horrendos cometidos" por los dos acusados en el contexto de la violencia postelectoral en el país africano entre diciembre de 2010 y abril de 2011, cuando Gbagbo quiso mantenerse en el poder pese a haber perdido las elecciones presidenciales frente a Alassane Ouattara.

En esos tumultos murieron unas 3,000 personas, según la ONU.

La Fiscalía citará a declarar a investigadores, miembros de las fuerzas de seguridad y de defensa, de la milicia juvenil pro-Gbagbo, y de mercenarios, y expondrá vídeos incautados en la radiotelevisión estatal y escenas de crímenes grabadas por víctimas o el libro de visitas del Palacio presidencial, explicó Bensouda.

También pretende citar a expertos en balística, técnicas forenses digitales, análisis de ADN y en patologías, agregó.

La fiscal relató el caso de una testigo que el 16 de diciembre de 2010 estuvo participando en una marcha en apoyo a Ouattara hacia la sede de la radiotelevisión marfileña cuando fue arrestada por la Gendarmería, detenida en la prefectura de la Policía con otros civiles y retenida junto a más mujeres durante tres días en los que fue violada sistemáticamente, al igual que las demás.

Otras pruebas de la Fiscalía se refieren al 24 de febrero de 2011, cuando "el señor Gbagbo ordenó a sus fuerzas no perder Abobo", un vecindario de Abiyán, que se convirtió en el "escenario de la violencia persecutoria de las fuerzas afines" al expresidente.

También relató que el 3 marzo de 2011 más de 3.000 mujeres se reunieron en Abobo para exigir la renuncia de Gbagbo y denunciar violaciones de derechos humanos, cuando, según Bensouda, un convoy de las fuerzas de seguridad y defensa abrió fuego y asesinó "a sangre fría" a siete de ellas.

Bensouda reiteró que los cargos no son contra los marfileños, contra uno u otro segmento de la población, ni tampoco contra ningún grupo político, étnico o religioso, por lo que el proceso "no está motivado por consideraciones políticas", aseguró con contundencia.

Pidió al pueblo de Costa de Marfil que tenga paciencia porque su oficina, que lleva a juicio el primer caso sobre la situación en ese país, sigue investigando y "habrá más" casos "con independencia de la afiliación o del bando" político.

"No pararemos hasta que el trabajo esté hecho", aseguró la fiscal.

El juez Cuno Tarfusser recordó que debe ser la Fiscalía la que pruebe la responsabilidad de los acusados, que se declararon no culpables en la apertura del juicio.

Las partes se enzarzaron además por los tiempos dados para el juicio y las defensas protestaron porque, en su opinión, no se les dio tiempo suficiente para estudiar minuciosamente las pruebas.

La Fiscalía se defendió de estas quejas asegurando que desclasificó sus documentos en diciembre de 2014.