CDMX.- El año pasado la Policía Federal (PF) destinó 23 mil millones de pesos en “operativos para la prevención y disuasión del delito” pero, aunque cumplió parte de sus metas como la elaboración de fichas criminales o bases de datos biométricos, eso no se vio reflejado en una disminución de la violencia ni en mejores condiciones de seguridad del País.

Lo anterior es parte de la auditoría de desempeño 22-GB a la Policía Federal, como parte de segundo informe de la Cuenta Pública de 2017.

Estas son algunas de la metas que la PF cumplió al 100 por ciento: 481 operaciones institucionales basados en indagaciones científicas, 575 fichas criminales, 52 agendas de riesgo e ingresó de 10 mil 520 datos biométricos y balísticos a las bases de datos, ejecución de 7 mil 447 operativos en atención a solicitudes presentadas por autoridades locales.

Sin embargo, señaló la ASF respecto al gasto erogado, “no contó con un mecanismo que le permita medir su contribución relativa a mejorar las condiciones de seguridad en el País, expresado en términos del efecto social” y, por lo tanto, “no contó con un mecanismo que le permita medir su contribución relativa a mejorar las condiciones de seguridad en el País”.

Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indican que durante el 2017 hubo un aumento en lo delitos al registrarse un millón 817 mil 61 delitos de todo tipo, lo que significa una tasa de mil 471 nuevos ilícitos por cada 100 mil habitantes.

En términos porcentuales esto significa un incremento de 10.26 por ciento con respecto al 2016, cuando hubo un millón 628 mil 438 delitos, equivalentes a una tasa de mil 334 ilícitos.

Con respecto en la medición de objetivos, la Policía Federal no identificó ni clasificó cuántas y cuáles de sus actividades fueron enfocadas en la prevención del delito, y cuáles son de reacción ante hechos delictivos o de alteración pública. 

Con información de Animal Político