MÉXICO.- Desde hace unos meses está implicado en el ocultamiento de pruebas en el caso Tlatlaya, municipio del Estado de México (Edomex) donde 22 personas fueron aparentemente ejecutadas a manos de militares… y en estos días podría convertirse en Magistrado de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Y es que el Procurador de Justicia de Edomex, Alejandro Gómez Sánchez,  es uno de los principales “gallos” que el presidente Enrique Peña Nieto ha presentado en sus ternas de candidatos para ocupar esos máximos puestos dentro del Poder Judicial Federal.

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En estos días se lleva a cabo el proceso para elegir a las dos personas que deberán sustituir a los actuales magistrados Juan Silva Meza y Olga Sánchez Cordero, quienes dejarán sus puestos el 30 de noviembre.

Sin embargo, aunque se menciona como uno de los candidatos más fuertes, el procurador Gómez Sánchez no la tiene tan segura, pues hay quienes afirman las tendencias apuntan a que sean dos mujeres las asignadas como nuevas magistradas.

De cualquier forma, la sombra del Caso Tlatlaya seguirá persiguiendo  al Procurador mexiquense, quien es señalado por afirmar que no había pruebas en contra de los militares, específicamente que no había elementos para sospechar que la escena de las muertes haya sido alterada, como la señala hoy información difundida en web por portales como sinembargo.mx