Fuerza Coahuila clausura rastro clandestino al sur de Saltillo

Usted está aquí

Fuerza Coahuila clausura rastro clandestino al sur de Saltillo

Ubicación. El rastro clandestino se encuentra en la colonia Ricardo Flores Magón. especial
trabajadores del lugar intentaron sobornar a los oficiales; serían procesados por cohecho

Con la cantidad de 6 mil 500 pesos, 3 descuartizadores intentaron comprar a los elementos de la Fuerza Coahuila a cambio de no serles clausurado el domicilio que habilitaron como rastro clandestino y donde destazaron a decenas de animales caprinos. 

Se procedió al aseguramiento de los empleados Juan Manuel Pérez Faz, de 52 años, su hermano Antonio de 47, y su hijo Juan Pérez Sánchez, de 24; todos quedaron a disposición de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) por el delito de cohecho. 

Mientras que la Secretaría de Salud ordenó el cierre del negocio que se localiza en la calle Fernando Palomares lote 22, en la colonia Ricardo Flores Magón, situada al sur de Saltillo, debido a que se laboraba en condiciones insalubres. 

Varios de los animales estaban destazados y colgados en un corral, el cual colinda con un arroyo, donde presuntamente arrojaban la sangre. 

Se aseguró un total de 38 cabras vivas que ya se preparaban para ser sacrificadas sin condiciones higiénicas y sin ningún tipo de control sanitario. 

Foto: Especial

Un breve comunicado que emitió la Comisión Estatal de Seguridad (CES) da a conocer que el viernes por la tarde, agentes de Fuerza Coahuila realizaban un recorrido por la calle mencionada, de donde se percataron de tres personas que descargaban varios animales caprinos. 

La mayoría iba en una camioneta color verde, con placas de circulación EY04951 de Coahuila y cuyos ocupantes vestían overoles en color azul tipo carnicero, presentando manchas de sangre en ellos. 

Al realizar una inspección a su vestimenta, así como al vehículo mencionado, encontraron una tina con cinco cuchillos grandes, además en la caja el vehículo se encontraron 38 cabezas de ganado caprino de diversos colores y tamaños. 

Posteriormente, las autoridades procedieron a resguardar el área para que el Ministerio Público y autoridades de salud realizaran las investigaciones correspondientes. 

Este tipo de acciones forman parte de los operativos continuos de supervisión ordenados desde el Grupo de Coordinación

Operativa (GCO) a fin de clausurar aquellos que operan en la irregularidad y el clandestinaje, donde se procesa carne no apta para el consumo humano. 

En el año 2015, en Coahuila se clausuraron 15 rastros, la mitad de ellos clandestinos.