Figuras y objetos en el silencio sepulcral

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Figuras y objetos en el silencio sepulcral

Fotos: Vanguardia/Marco Medina
Estas son las últimas moradas de los que ya se fueron

TEXTO y FOTOS: Marco Medina

Hoy, aquí, en la víspera de los días de Los Santos Niños Difuntos y de Los Muertos, reina la calma. Uno que otro familiar llega con escobas, cloro y hasta con pintura y herramienta para arreglar la tumba del ser querido.

Las hay grandes, pequeñas, enormes, muy elegantes, sencillas, humildes, vistosas . Existen también solo con tierra encima. Algunas están pintadas de colores, unas tienen estatuas, ángeles, vírgenes, santos, cristos. También hay juguetes en las tumbas de algunos niños.

Los sepulcros, según los niveles y los gustos, son diversos. Se ven de estilo gótico y renacentista, con una “Piedad”, como la de Miguel Ángel en el Vaticano, o con estatuas vigilantes y silenciosas.

Y las cruces, símbolos en las tumbas de católicos predominan. Hay desde artesanales de madera, metal, granito, cemento, yeso, de flores y de cristal.

Estas son las últimas moradas de los que ya se fueron, de quienes partieron con la edad, por enfermedad y de quienes se fueron abruptamente, de los niños y bebés que tuvieron vidas cortas.
La celebración del Día de Muertos, con más de 5 mil años de antigüedad en América, es la fiesta más celebrada por la humanidad, y es la que nos recuerda que precisamente, de lo único que todos estamos seguros en esta vida, es de que todos un día nos vamos a morir.