Trabajo forzado para Roger Federer. El suizo se recuperó tras perder los dos primeros sets y venció 6-7 (4), 4-6, 6-3, 7-6 (9) y 6-3 a Marin Cilic para meterse semifinales. 

El suizo arrancó con serios problemas. En un set tremendamente parejo, el croata (13º en el ranking y 9º favorito) sacó claras ventajas en el tiebreak, al punto de ponerse 5-0 y lograr cerrarlo 7-4, en un parcial en el que ganó el 95% de los puntos con su primer servicio.

Ya en el segundo, apareció el primer quiebre. Cilic aprovechó su chance en el tercer juego para poner todo cuesta arriba para el suizo. Si bien el croata hilvanó un par de doble faltas en fila, no tuvo problemas para mantener la ventaja hasta llevarse el segundo y poner las cosas 7-6 (4) y 6-4.

El duelo parecía tener un final anunciado en el séptimo game del tercer set, cuando el croata tuvo triple chance de quiebre. Sin embargo, el suizo revivió llevándose cinco puntos en fila. Acto seguido, consiguió su primer quiebre en el partido y confirmó con su servicio, para llevarse el tercero 6-3 y forzar a un cuarto. Tdoo producto de un cambio de estrategia, en busca de cambios de ritmo y mayor movilidad para su rival.

Ya en el cuarto, Federer volvió a estar contra las cuerdas, remontó dos match points sirviendo 4-5 y también 5-6 pero logró resurgir a base de primeros servicios y así forzar a otro tiebreak. En esa instancia, levantó un tercer match point para terminar forzando al quinto set, luego de quedarse, justamente, con el quinto set point que dispuso: 7-6 (9) para el suizo.

En el definitivo, claro, los nervios terminaron de invadir a Cilic, que dejó de tener el mismo pulso. Por el contrario, la confianza de Federer estaba por las nubes y lo ratificó al máximo: rotua en el octavo game y 6-3 confirmado, en su primer match point.

A un mes de cumplir 35 años, Federer aun vive con expectativa por ver si puede lograr un nuevo Grand Slam, el primero desde Wimbledon 2012, para ampliar su récord en los Majors a 18 conquistas. Además, busca superar al estadounidense Pete Sampras y ser el máximo campeón en el césped de Londres, con ocho títulos.