Familia cumple cuarentena y exhorta a otras a hacerlo, 'una falta de respeto, poder y que nos valga'

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Familia cumple cuarentena y exhorta a otras a hacerlo, 'una falta de respeto, poder y que nos valga'

Desacato. Pese a haber entrado en la fase 3 de la pandemia y reforzado la entidad las restricciones, las aglomeraciones se siguen presentando en el centro de la ciudad.
Susy, una madre de familia, pide a quienes puedan, quedarse en casa ‘por nosotros y los demás’

Todos tenemos una razón para hacer la cuarentena para evitar el contagio y transmisión del coronavirus. Pero no todos los mexicanos podemos trabajar desde casa y no salir a la calle durante más de un mes.

“Se me hace una falta de respeto muy grande poder hacer la cuarentena y que nos valga”, considera Susy, quien desde hace dos semanas, cuando iniciaron las restricciones sanitarias en Coahuila, no ha salido de su hogar. Ella, su esposo y sus tres hijos pudieron, y aunque la pandemia es una preocupación real, la familia aprovecha el tiempo para forzar sus lazos.

“Lo que más practicas es tolerancia, ser solidario, ser empático”, dice Susy vía telefónica sobre la nueva convivencia que ahora tienen en su casa, pero también se refiere a todas las personas que no pueden quedarse en sus hogares.

Platica con VANGUARDIA solicitando respeto a la intimidad de su familia que vive en el sur de Saltillo, pues atiende rigurosamente las medidas decretadas por el Gobierno y sabe que las redes sociales son un territorio propicio para el escarnio público, aunque hagas lo correcto.

“Lo estamos haciendo porque queremos estar bien para nuestra familia, y cuando pase todo esto, vernos todos nuevamente con la emoción y satisfacción de que cumpliste con lo que se te dijo”, expresa.

Llamado. Susy y su familia pide a quienes tienen la posibilidad de estar en casa, hacerlo para no poner en riesgo a otros.

CONVIVENCIA

Las primeras dos semanas de encierro forzoso no los tiene al borde del colapso emocional. “Siempre hemos hecho actividades en casa. La única diferencia es que estamos más tiempo juntos. Disfrutamos más almorzar, comer juntos, porque no coincidíamos”.

Antes de la cuarentena, su casa se vaciaba antes de las 7:00 horas: ella, de 41 años, dejaba al hijo más pequeño, de 6 años, en el kínder. El esposo, de 43 años, se iba al trabajo en la industria automotriz. Los hijos adolescentes asistían a clases, el de 17 años a la Facultad de Medicina, y la de 14 años a tercero de secundaria.

A las 14:00 horas, Susy recogía a la chica y al hijo menor; el más grande llegaba por su cuenta, y comían juntos. El padre regresaba a casa después de las 18:00 horas y comía solo. A veces sólo coincidían los cinco los fines de semana.

Pero todo cambió. Aunque el papá tiene que salir algunos días al trabajo presencial y a hacer el mandado, la mayor parte del tiempo está en casa: comen juntos, arreglan cosas en casa, ven películas, se desvelan un poquito, juegan, tocan algún instrumento musical, arman rompecabezas, platican, toman clases en línea, hacen tarea.

Revisiones. También se registra afluencia de automovilistas en las carreteras, donde se han implementado filtros.

“Estamos muy bendecidos porque podemos trabajar desde casa”, dice Susy. Para algunos esto es imposible y para otros, si pueden, les parece aburrido y fastidioso, pero para ella siempre hay algo que hacer: acompañar los estudios de sus hijos, pues el de kínder tiene tareas y debe mandar por mail o WhatsApp la evidencia de que realizó sus deberes. La de secundaria también. Y el mayor lleva clases por internet.

“No me importa que no vaya de vacaciones, que no vaya a tener una fiesta de cumpleaños, que no pueda salir, lo que más me importa es que mi familia esté bien, que Dios está con nosotros”, dice Susy.

CUMPLEAÑOS EN CUARENTENA

El 26 de marzo el esposo de Susy cumplió 43 años. El festejo fue entre los cinco miembros de la familia: cocinaron hamburguesas al carbón, cantaron las mañanitas y comieron pastel. Y así pasarán también los cumpleaños número 15 y 18 de los hijos: en cuarentena.

A LOS NIÑOS SE LES HABLA CON LA VERDAD

Ningún ha perdido el control. Saben que están cumpliendo con una responsabilidad, pues ellos que pueden y deben hacerlo. ¿Pero cómo le explicas a un niño de 6 años que no puede salir a la calle, ni ver a sus abuelos y amigos?

“Le dijimos que no podemos salir, que no podemos visitar a nuestra familia porque ahorita la situación está así. Ya le platicamos cómo se contagia y por qué tenemos que estar aquí”, explica Susy.

PRIMERO LA FAMILIA

Los papás de Susy también están cumpliendo su cuarentena. Y ella los procura mediante llamadas telefónicas y dispositivos digitales.

“Me duele mucho que no puedo ir a verlos, pero es por su bien. Si se ofrece algo, obvio que voy a hacerlo, pero mientras no”, dice.

Una de las principales recomendaciones de las autoridades es evitar que los adultos mayores salgan a la calle, porque ellos y las personas con padecimientos respiratorios o crónicos, como diabetes, hipertensión, son un sector de riesgo en caso de contraer el COVID-19.

“Sí extrañas, pero no pasa nada”, platica Susy, quien pide ser responsables “por nosotros y los demás”.