A más de 10 meses de que un expolicía municipal atropellara y a consecuencia de eso murieran una mujer y el hijo de ésta, la Juez de Control, Silvia Catalina Ortiz Castañeda, ordenó ayer quitar el brazalete electrónico al inculpado, esto con una serie de condiciones. 

Esto se informó ayer después de que concluyera la audiencia en la Sala 7 del Centro de Justicia Penal, en la que familiares de las personas que fallecieron en el accidente en la colonia Rincón de Guadalupe a finales del año pasado, lanzaron insultos al expolicía Juan Hernández Veloz, debido a que la juez le quitó el brazalete electrónico. 

Debido al caos que originaron María del Rosario Orejón García y Esmeralda Villela, familiares de las víctimas, fue necesaria la intervención de elementos de la Policía Procesal, para calmar y desalojar por la fuerza a las quejosas. 

Informes extraoficiales de dicho tribunal dieron a conocer que la audiencia intermedia, que inició alrededor de las 15:00 horas, citó a Juan Hernández Veloz, en compañía de su abogado defensor. 

En la audiencia, Ortiz Castañeda le informó a Juan Hernández que para mañana miércoles 28 de octubre está obligado a realizar un depósito de 200 mil pesos para los familiares de las víctimas. 

También le informó que está obligado a proporcionarles de manera mensual, la cantidad de 700 pesos en efectivo en un plazo de 3 años, todo se hará ante el magistrado. 

La juez Silvia Ortiz le impuso una serie de requisitos al imputado: no tomar represalias ni molestar a 
los familiares de los afectados. Además, se le prohibió conducir cualquier tipo de vehículo por tres 
años. 

También, Juan Hernández está obligado someterse a rehabilitación a una clínica, no consumir drogas, ni tomar bebidas embriagantes; en caso de violar los reglamentos se solicitará su internamiento al reclusorio varonil de Saltillo. 

Además, la camioneta con la que cometió el accidente tendrá que endosarla a nombre de la ahora beneficiaria María del Rosario Orejón. 

ENTÉRESE 
> Desde el 12 de diciembre de 2014, Juan Hernández Veloz fue acusado por el delito de homicidio culposo en agravio de Erubiel Sifuentes Villela, quien tenía 6 años y la madre Yazmín Villela Orejón, de 28. 
> En ese entonces, el expolicía manejaba una camioneta Dodge Ram, perdió el control del volante a consecuencia del exceso de velocidad y el estado de ebriedad en el que se encontraba, y se subió a la banqueta, donde caminaba la madre e hijo. 
> El acusado huyó, pero fue ubicado y detenido en el exterior de su domicilio, sin embargo, días después fue liberado con la medida cautelar del brazalete electrónico.