Diputados locales y funcionarios de la Secretaría de Finanzas explicaron a representantes de diversos organismos civiles la reestructura de la deuda pública del estado que recientemente fue aprobada por el Congreso del Estado. Quedó pendiente la entrega de diversos documentos, como el estudio económico en el que se basó el proyecto.

Los ciudadanos habían presentado el pasado lunes un escrito ante el Congreso Local, con la solicitud de ser recibidos por una comisión de legisladores que explicaran a fondo el origen e impacto de la reestructura de la deuda pública de la entidad.

“Hubo diputados que quisieron confundir, diciendo que se estaba pidiendo más deuda, pero no. Lo que se hace con Banobras y Hacienda es un nuevo esquema de fideicomiso, al que migran los créditos de la deuda que mejora la calificación crediticia y con ello se busca mejorar las condiciones de pago”, señaló el diputado Javier Díaz.

Los ciudadanos expusieron las dudas que tienen respecto a la reestructuración, desde la evolución de los montos de la deuda en los últimos años, hasta el significado de la reestructuración. Solicitaron además documentos, como el estudio en el que se basó el proyecto de reestructura.

“Vamos a iniciar todo un proceso que es muy largo y complicado que es primero definir. A la hora que se haga, conforme a la negociación, la tasa efectiva tendrá que ser mejor que la actual, incluidas comisiones y todo, porque es lo que la Ley nos pide. 

Tanto los diputados como los funcionarios reiteraron que la reestructura por el monto total de la deuda (36 mil 348 millones de pesos), no significa pedir más crédito.

MAL HISTORIAL

No se tiene pensado solicitar más créditos, pues incluso la Ley se lo prohíbe a Coahuila, al estar en semáforo rojo por su situación financiera.