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Expertos respaldan alternativas sin humo para reducir el daño del cigarro
Eventos como el 8° Foro Mundial Sobre la Nicotina, celebrado los pasados días 17 y 18 de junio en Liverpool, Reino Unido, han reavivado el debate sobre la reducción de daño por tabaquismo y la búsqueda de alternativas al cigarro, menos perjudiciales para los fumadores.
Y es que organizaciones civiles de 12 países como México, Brasil, y España, enviaron una carta a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a los Ministerios de Salud internacionales para ser incluidos, junto con los consumidores, científicos y especialistas, en los debates sobre las políticas de prevención y control del tabaco para alcanzar mejores soluciones que las restricciones o la prohibición.
“Las personas consumidoras de tabaco y nicotina, así como las organizaciones de la sociedad civil y la academia, que defendemos la reducción de riesgos y daños en el consumo de nicotina, tenemos derecho a la igualdad y a participar de las asambleas, reuniones y políticas públicas como lo tienen las organizaciones antitabaco, los representantes de las farmacéuticas, entre otros”, dice la misiva.
En un contexto mundial en el que más de tres millones de personas han fallecido por el Covid-19, la gente ha comenzado a cuidar más su salud respiratoria, por lo que 98 millones de fumadores han hecho el cambio a productos de nicotina más seguros, como los calentadores de tabaco o los vapeadores.
De acuerdo con la Asociación Española Contra el Cáncer, del 70 al 80 por ciento de los consumidores les gustaría dejar el cigarro, una tarea que no resulta sencilla, pero sí viable a través de alternativas sin humo para poder dejar el hábito de forma progresiva. Esta teoría la refuerza una encuesta realizada por Independent European Vape Alliance (IEVA) en octubre de 2020, donde el 80% de los consumidores que se cambiaron a los vapeadores, confirmaron que dejaron de fumar, y otro 12% redujo su consumo habitual de cigarrillos.
Por otro lado, los especialistas han concluido que cuando el tabaco se quema se liberan sustancias muy nocivas para la salud, lo cual puede evitarse con los llamados calentadores de tabaco que no crean dicha combustión, y por lo tanto, no producen humo tóxico, olor, ni cenizas. Además, estos dispositivos evitan la producción de alquitrán y las toxinas que produce el papel al ser quemado, y que provocan desde mal aliento hasta enfermedades cardiovasculares y cáncer de pulmón, boca y garganta.
Asimismo, determinaron que son menos contaminantes y no causan daños a terceros, como ocurre con el humo del cigarro, el cual provoca que miles de fumadores pasivos aspiren sustancias tóxicas involuntariamente e incrementen de 20 a 30 por ciento el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y cáncer de pulmón, según la Clínica Universidad de Navarra.
Por último, los más de 40 expertos que conformaron el panel del Global Forum on Nicotine 2021 (entre ellos científicos y especialistas tanto de la salud, como de la política y la economía, del sector público y privado, dentro y fuera de la industria tabacalera), reiteraron la necesidad de aplicar la estrategia “reducción de daño” para combatir el cigarro y de tomar en cuenta las alternativas libres de humo y combustión como cigarrillos electrónicos, vapeadores y calentadores de tabaco, que si bien no están libres de riesgo, representan mejores opciones que fumar de forma convencional y, además, son claves en el cambio hacia un futuro sin humo.