CDMX.- Trabajadores de la mina Peñasquito, ubicada en el municipio de Mazapil, se manifestaron frente al Congreso del estado para pedir a los diputados que intercedan a destrabar el conflicto que existe entre la empresa y un grupo de contratistas, que mantienen un paro de labores desde hace un mes.

La minera anunció que suspendería todo tipo de pagos por el bloqueo, así como las aportaciones a fideicomisos.

El problema se originó el 27 de marzo, cuando un grupo de ejidatarios de la comunidad de Cedros y contratistas de la empresa CAVA comenzaron con un bloqueo del centro minero, argumentando que las actividades afectan un ojo de agua que impide su uso para consumo humano y las actividades agropecuarias, cuyas acciones han incrementado.

Argumentan que este reclamo es un acuerdo incumplido en 2009 con el contrato firmado con el ejido de Cedros y que su lucha es por la tierra, el agua y la biodiversidad.

Desde entonces, las mesas de negociaciones se han tensado, al grado que el pasado lunes, la empresa

Goldcorp, propietaria de la mina Peñasquito, emitió un comunicado para informar que había determinado suspender todos los pagos a empleados, contratistas, proveedores y comunidades, así como las contribuciones a fideicomisos, becas y programas de inversión social.

La empresa canadiense que opera la mina Peñasquito, la más grande de oro a cielo abierto, considera que este bloqueo es “ilegal”, porque ha impedido la salida y entrada terrestre del personal y de los insumos que ha traído “consecuencias graves”.

Sin embargo, en esa postura también revela que, en las mesas de negociación, los representantes de las organizaciones sociales del senador José Narro (Morena) han pedido 442 millones de dólares para resarcir la presunta afectación del cuerpo de agua en la comunidad de cedros. 

EL DATO
442 millones de dólares piden para resarcir una presunta afectación de un cuerpo de agua.