Una exposición mostrará juntas, por primera vez, las obras que el pintor y muralista mexicano David Alfaro Siqueiros creó mientras estaba recluido en la cárcel conocida como El Palacio de Lecumberri, ubicada en la Ciudad de México.

La muestra se titula "El retorno del realismo: Siqueiros y la neovanguardia (1958 -1974)", y está compuesta entre otros por dos biombos que pintó en 1960 como escenografía para la obra de teatro “Licenciado no te apures”, montada y escenificada ese año por un grupo de presos.

Siqueiros llegaba por tercera ocasión a esa prisión, donde había sido encerrado antes en 1930 y 1940. Fue aprehendido el 9 de agosto de 1960 junto con los dirigentes del movimiento ferrocarrilero  mexicano, y acusado de disolución social.

El pintor, reconocido junto a José Clemente Orozco y Diego Rivera como unos de los más importantes representantes del movimiento muralista en México, accedió a la invitación que le hicieron los presos para pintar la escenografía de una obra sobre un mal abogado.

“Tú tranquilo, no te apures, yo me encargo de todo”, les decía a sus clientes, pero nunca hacía nada por ellos, según relató el curador de la exposición, Julio García Murillo.

García explicó que uno de los biombos siempre ha sido propiedad del Archivo General de la Nación (AGN), institución que se asentó desde 1982 en lo que fue la cárcel de Lecumberri. El otro estuvo en manos de un coleccionista privado y en 2015 fue adquirido por el AGN.

Esta será la primera ocasión que las obras se puedan apreciar en su conjunto.

En una entrevista que el poeta Sergio Mondragón le hizo a Siqueiros dentro de la cárcel en 1961, el muralista dijo sobre estas obras: “Con la escenografía de 'Licenciado, no te apures', realizada en biombos, se inició el género de la pintura artística aplicada al teatro, un estilo novedoso de indudable porvenir”.

“El retorno del realismo: Siqueiros y la neovanguardia (1958-1974)”, que se exhibirá en la Sala de Arte Público Siqueiros de la capital mexicana, también revisa documentos y obras que muestran a un Siqueiros activo, tan agresivo y tan disidente como siempre en cuestiones del arte y la política.

"La búsqueda tiene que ver con la manera en que Siqueiros, durante los años 60 y 70, se relacionó con artistas jóvenes de esa generación", señaló García.

El curador explicó que Siqueiros exploró "momentos específicos en donde el realismo, esta bandera que Siqueiros defendió a lo largo de toda su vida en contra del arte abstracto, va a retornar y convertirse en un espacio de disputa durante los años 70”.

La exposición propone desviar la mirada de los prejuicios que generó en torno a Siqueiros la llamada Generación de la Ruptura, que surgió en la década de 1950 como una reacción ante el arte revolucionario y nacionalista mexicano, representado en ese entonces también por Rivera y Orozco.

A través de 18 obras, entre estudios, bocetos, litografías, material fotográfico, documental y obra de caballete, la muestra busca mostrar las otras relaciones que estableció Siqueiros con artistas, teóricos, poetas jóvenes, con el movimiento chicano y con la generación beat.

La exposición permanecerá abierta desde mañana hasta el 14 de mayo en la Sala de Arte Público Siqueiros.