Cinco años después de que la PGR ordenara su captura por presuntos vínculos con la delincuencia organizada, el excoordinador de Agentes del Ministerio Público en Saltillo, Everardo Rosales Saucedo, reapareció para dar a conocer que fue exonerado, y que todo se trató de una trampa del Gobierno Federal en el llamado “Coahuilazo”, para involucrar con el narco a políticos como Rubén Moreira, Humberto Moreira, Jorge Torres, Jericó Abramo, entre otros. 

También confirmó que buscará su reinstalación en el Gobierno del Estado en la PGJE, así como el pago de los salarios de estos cinco años y peleará por el pago de daño moral que le ocasionó la PGR, el Gobierno Federal y la SEIDO. 

Everardo Rosales se dijo perseguido injustamente desde el 23 de febrero de 2012, cuando elementos de la SEIDO intentaron capturarlo y hasta noviembre de ese año salió su orden de aprehensión. 

Explicó que tramitó amparos para poder actuar y demostrar su inocencia: era acusado de protección a la delincuencia organizada a través de lo que llamó una falsa declaración de un testigo protegido de la PGR, entonces dirigida por Marisela Morales. 

Criticó al precandidato del PAN al Gobierno de Coahuila por hacer señalamientos de que exfuncionarios de la entidad estuvieron involucrados con el narcotráfico, porque aseguró que Guillermo Anaya sólo obtuvo una carta de parte de la PGR porque se la extendió su compadre el expresidente Felipe Calderón, en cambio él y los otros señalados en el “Coahuilazo” tuvieron que demostrarlo ante tribunales. 

Explicó que ya existe una queja ante la CNDH por parte de otros señalados en el “Coahuilazo” y que en su momento buscará que la PGR, la Federación y exfuncionarios de esta dependencia paguen la reparación del daño porque perdió todo. 

DECLARACIÓN
>  Everardo Rosales Saucedo: “ante estos hechos hemos enfrentado consecuencias graves; perdimos nuestro patrimonio, algunos la familia, la libertad, el trabajo y reputación. Hemos sido señalados, ofendidos, denigrados, y relegados. El tiempo no regresa, y algunos compañeros siguen luchando para que les regresen sus bienes, pues siguen asegurados por la SEIDO”.