Aunque la mayoría de las escuelas que utiliza el Consejo Nacional de Fomento Educativo en las comunidades rurales de Coahuila son de adobe, hasta ayer por la mañana no había reporte de daños, sin embargo, se inició una gira para constatar las buenas condiciones de los inmuebles, explicó Antonio Antúnez Flores.

El delegado del Conafe explicó que no se recibieron reporte de daños en los planteles que tiene el Consejo en más de 350 comunidades de Coahuila, sin embargo, se hará una revisión física de las instalaciones, principalmente en el norte, donde hubo mayor afectación por las lluvias.

“En su mayoría son de adobe (las instalaciones), hemos estado revisando en cada una de las regiones. Salgo hacia el Norte, a Cinco Manantiales para entregar becas y revisar los centros”, dijo el delegado federal.

Agregó que cuando es necesario cada municipio o bien el Gobierno Estatal han apoyado para la rehabilitación y reconstrucción de los diferentes centros en toda la entidad.

“Hasta ahora no existe ningún reporte de que tengamos alguna escuela con daños o que se nos haya caído. Vamos a revisar estas regiones y esperamos un saldo blanco”, explicó.

Internet causa deserción
Por otra parte, el delegado de Conafe dio a conocer que uno de los motivos de deserción de los instructores comunitarios, que son jóvenes que enseñan educación Básica, es que no cuentan con internet.

Los jóvenes regularmente no encuentran en las comunidades rurales todos los servicios que existen en una ciudad, a veces escasea el agua y casi en ninguna hay conexión a internet, por lo cual buscan otras opociones.

La capacitación de personas como instructores comunitarios es constante porque hay rotación; los beneficios que tienen los jóvenes es que de manera posterior pueden obtener una beca para continuar sus estudios profesionales o técnicos.