EU espera cerrar sus heridas en el juicio contra Derek Chauvin que acabó con la vida de George Floyd

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EU espera cerrar sus heridas en el juicio contra Derek Chauvin que acabó con la vida de George Floyd

El próximo 29 de marzo inicia el juicio contra Derek Chauvin el expolicía que presuntamente acabó con la vida del afroamericano George Floyd.

Estados Unidos reabrirá sus heridas por la trágica muerte del afroamericano George Floyd en el juicio contra el expolicía que presuntamente acabó con su vida, cuyos argumentos orales empiezan el próximo 29 de marzo, con la esperanza de que un posible veredicto de culpabilidad motive a otros fiscales a actuar contra agentes implicados en casos de violencia racial.

"El impacto del juicio por presunto asesinato policial en Mineápolis (Minnesota) dependerá del veredicto, pero es de esperar que uno de culpabilidad motive a fiscales a presentar cargos de asesinato en otros casos en los que la policía ha quitado vidas innecesariamente", analizó en una entrevista con Efe el abogado de derechos civiles James DeSimone, especializado en violencia policial en Los Ángeles.

Este juicio valorará la culpabilidad o no del expolicía blanco Derek Chauvin, que fue filmado por cámaras de seguridad y móviles de transeúntes mientras presionaba con su rodilla durante 8 minutos y 46 segundos el cuello de Floyd, quien esposado y tendido en el suelo llamó a su madre y repitió dos decenas de veces: "No puedo respirar".

Chauvin, que se encuentra actualmente en libertad condicional, está acusado de tres cargos que, de mayor a menor gravedad, son: asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado con una condena máxima de 25 años; y homicidio en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad.

UN CAMBIO "POSITIVO" EN EL SISTEMA PENAL

 

Las expectativas y la tensión que rodean a este caso son tantas que los argumentos orales empezarán el próximo lunes en medio de enormes medidas de seguridad en el juzgado de Mineápolis, que ya está rodeado de barreras de hormigón y alambre de espino ante el temor de protestas violentas y la llegada de milicias de ultraderecha o miembros de grupos racistas.

Para Christopher Dennison, profesor asociado del Departamento de Sociología de la Universidad de Buffalo, en Nueva York, el resultado del juicio en este contexto debería "promover un cambio positivo en el sistema de justicia penal" estadounidense, ampliamente criticado por tener diferentes varas de medir en función de la raza del acusado.

"Se espera, por un lado, que la familia y amigos de George Floyd obtengan un cierre y, por el otro, que el resultado promueva un cambio positivo en el sistema de justicia penal", reflexionó Dennison en declaraciones a Efe.

Quien ha visto centenares de agresiones de este tipo en los últimos 35 años ha sido DeSimone, cuyo primer caso fue el de representar a personas que habían sido arrestadas en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA, en sus siglas en inglés) durante las protestas contra el "apartheid". 

"La pregunta que Estados Unidos debe afrontar es por qué sus fuerzas policiales matan a tanta gente. Necesitamos una mejor capacitación, una mejor selección de agentes que tienen opiniones extremistas de supremacía blanca, fiscales especiales dedicados a erradicar la brutalidad policial y consecuencias más consistentes para los policías que violan la ley", agregó el letrado.

UN JURADO DIVERSO

 

Un importante factor en el juicio será el racismo y, por ello, la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU), uno de los grupos más importantes de EU en la defensa de los derechos civiles, pidio que el jurado incluya a miembros con diferente color de piel y diferentes clases sociales.

De las 15 personas seleccionadas, nueve personas se definen como blancas y seis son de otras razas. Además, nueve son mujeres y seis son hombres.

Esta diversidad en el jurado significa en sí "un progreso" en EU, según la profesora de la Universidad de Nueva York, Kelli Moore, que ve en ello "una conciencia renovada de esta historia y en la organización inter e intrarracial".

Sin embargo, Moore recordó que la estructura económica y política de la policía en Estados Unidos "se organiza en torno al control de las poblaciones negras, morenas e indígenas, y también de los blancos pobres". 

"Hay estudios que demuestran que las interacciones son desiguales entre la policía y los civiles en función de la raza y la residencia", criticó la experta, que espera que el veredicto lleve a EU a replantearse la "viabilidad de la reforma policial".